Jesucristo murió en San Lorenzo

El pueblo de San Lorenzo se volcó con la ocasión. «Sufrió para predicar», pronunció el apostol Juan [Juan Francisco Afonso] minutos antes de que las huestes romanas levantaran a Jesús [Acaymo Domínguez, vecino de Tenoya] en la Cruz en un particular Gólgota o monte del Calvario. Un promotorio que en este caso estaba en el corazón de esta localidad de la periferia de Las Palmas de Gran Canaria. Bajo la dirección de David Báez, unos 80 vecinos y vecinas del distrito Tamaraceite-San Lorenzo-Tenoya representaron este sábado la Pasión de Cristo.

Durante algo más de una hora, los vecinos de manera amateur representaron en once escenas la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Lo hicieron con dos semanas de retraso, después de que la Dana que azotó el Archipiélago en el arranque de la Semana Santa obligara a suspender el evento. Y a pesar de ir a destiempo -se celebró en la denominada Octava de Pascua cristiana- eso no fue excusa alguna. A los vecinos que decidieron poner voz y presencia, se les unió un amplio equipo técnico de iluminación, sonido e imagen.

Más participación que el año pasado

«Ha habido más participación que el año pasado, se consolida sin duda el grupo de trabajo», remarca Yeray Castellano, presidente de la asociación cultural Tasate, entidad que impulsa la representación. El retraso provocó que más de uno de los participantes no pudiera asistir este sábado por problemas de agenda, pero lograron tapar esos huecos, «el grado de implicación ha sido brutal». Y el público respondió con emoción.

Pasión de Cristo escenificada por vecinos de San Lorenzo

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El cantante Iván Quintana, joven promesa del folclore canario, tendría que haber puesto voz y nota al espectáculo, pero el cambio de fechas trastocó los planes de la organización. En su lugar actuó David Matos, tanto en la escena de Jesús ante Poncio Pilatos como en la de su encuentro con su madre, María [Teresa Diepa]. Por su parte, Andrea Trujillo, vecina de Tamaraceite, también puso voz a la representación; concretamente en la escena de la Piedad cuando descienden a Cristo de la cruz.

El recorrido por la Pasión de Cristo arrancó en la plaza de la iglesia de San Lorenzo, donde Jesús hizo su entrada triunfal en Jerusalén a lomos de un burro y rodeado por una multitud ataviados como israelitas de hace 2.000 años. La Casa de Galicia coloboró con el vestuario. El recorrido teatral prosiguió por la Última cena con los Apóstoles y terminó en este punto con la traición de Judas y entrega de Jesús a los romanos en el monte de los Olivos. 

El calvario de Cristo

La fachada del colegio de San Lorenzo, por su parte, hizo las veces de fondo de la presencia de Jesús ante el Sumo Sacerdote, para dirigirse después hacia las inmediaciones del centro de salud, donde le esperaban Herodes y Poncio Pilatos para juzgarle. Tras los latigazos -otro momento de carga emocional para el público-, comenzó así el calvario de Cristo hacia la crucifixión, momento álgido de la Pasión que se produjo en el solar junto al mercado.

Cristo fue finalmente crucificado mirando hacia el casco de San Lorenzo. El pueblo ha recuperado este año su tradicional representación de la Pasión. Esta costumbre realmente la rescató Tasate el año pasado, pero la representación la hizo en el parque de Tamaraceite Sur, por lo que en esta ocasión han vuelto a un entorno más acogedor, el de las callejuelas del casco antiguo deSan Lorenzo.

«Hacemos cultura desde la participación», señaló el portavoz de Tasate al inicio de la función al aire libre. Y es que esa es la principal labor que está desarrollando este colectivo vecinal, en este caso en esencial colaboración con la concejalía del Distrito Tamaraceite-San Lorenzo-Tenoya.

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