Puerto de Las Palmas: aeronaves para mejorar la seguridad con la unidad 'Charrán'

La Policía Portuaria ha creado una unidad especializada en el manejo de drones en el Puerto de Las Palmas. El equipo reforzará las labores de vigilancia, inspección y seguridad en los muelles con la llegada de los nuevos aparatos, que son tres y están en fase contratación.

La unidad, que ha sido bautizada con el nombre de V / Charrán, integra a varios agentes con formación específica en este tipo de aeronaves no tripuladas, aunque es probable la impartición de cursos adicionales.

Un 'Glovo' con drones en el Puerto de Las Palmas

La unidad de charranes realizará las funciones propias de la Policía Portuaria, como es la vigilancia del recinto, el control de las infracciones marítimas y terrestres, o los accidentes en las terminales u otras zonas del puerto en las que se precise una cobertura aérea del espacio afectado. 

Mejor preparados

Este tipo de servicio, por ejemplo, puede resultar útil en un incendio de una planta de combustibles, pues este tipo de aparatos permiten ver desde arriba y en condiciones seguras las dimensiones de la emergencia desatada.

La creación de una unidad de drones es una vieja aspiración del cuerpo de seguridad portuario, que lleva meses formando a sus agentes y haciendo pruebas para estar preparados cuando lleguen los aparatos. 

La Autoridad Portuaria de Las Palmas (APLP) ha iniciado el procedimiento administrativo para comprar los drones, que quedarán adscritos al servicio policial, aunque también se podrán usar para el seguimiento de obras o cualquier otra actividad portuaria susceptible de colaboración.

Servicio marítimo

En breve, además, comenzará a funcionar el servicio marítimo de la Policía Portuaria, que realizará en la lámina de agua las mismas labores de vigilancia hechas en tierra. 

Las aeronaves no tripuladas, en ese sentido, servirán de apoyo para el control de la entrada y salida de las embarcaciones en el Muelle Deportivo, las zonas de uso restringido, la pesca en zonas no autorizadas, como el canal de acceso al Puerto de La Luz, vertidos y accidentes marítimos, por citar algunos de los incidentes o emergencias más habituales en la dinámica del recinto.

El presupuesto base de la licitación asciende a 58.924,90 euros, con la finalidad de adquirir tres tipos de Aeronaves No Tripuladas, con sus cargas y accesorios correspondientes. Uno de los drones tendrá una mayor autonomía al estar destinado a operaciones de largo alcance; otro será de despliegue rápido, y el tercero tendrá capacidad para el amerizaje (aterrizaje en el agua). 

Características de los equipos

Todos los aparatos estarán equipados con su unidad de control remoto, baterías y cargadores, según las características técnicas del concurso.

Las bases especifican que los elementos deben ser de reciente fabricación, no aceptándose ofertas de bienes usados o de segunda mano, con la finalidad de garantizar la confiabilidad y el rendimiento óptimo de los equipos proporcionados.

Los sistemas de control de tierra, además, deberán llevar una pantalla incorporada, así como unas conexiones que permitan el funcionamiento óptimo del hardware y el software, pues será necesario cubrir la distancia máxima del Puerto de Las Palmas (espacios terrestres y lámina de agua). El procesamiento correcto de los datos es fundamental para el funcionamiento y análisis de la información aportada para cada uno de los equipos.

Herramienta estratégica

Con la creación de esta unidad, la Autoridad Portuaria de Las Palmas moderniza y fortalece las capacidades de la Policía Portuaria del Puerto de Las Palmas. 

Los drones, en ese sentido, son una herramienta estratégica que permitirá mejorar la eficiencia, seguridad y capacidad de respuesta ante situaciones imprevistas, accidentes o emergencias, alineándose con las necesidades específicas identificadas a través del estudio del mercado y las operaciones actuales de la Policía Portuaria. 

El nombre elegido, Charranes, es un guiño al ave que el Cabildo de Gran Canaria y el Puerto crían en las plataformas instaladas en los muelles, las cuales han permitido que esta especie, muy territorial, aniden y se reproduzcan con éxito en La Luz.