Hoy se produce el equinoccio de otoño, la segunda fecha del año en que el día y la noche comparten duración. Esta jornada abre las puertas a la llegada de la estación en que el Sol se recoge cada día un poco más temprano. La reducción de los días convierte al otoño en una época triste, donde tenemos menos horas de luz y el frío hace acto de presencia. Estas circunstancias se cumplen en buena parte de España, aunque Canarias es una región privilegiada en la que el otoño, como el resto de las estaciones, se ve atenuado por la cercanía del Archipiélago al Ecuador y no sufre los cambios bruscos de temperatura de latitudes más septentrionales.

Existen dos días al año en los que las horas de luz y de oscuridad son iguales, uno es el equinoccio de primavera y el otro, el de otoño. Otra de las características típicas de esta jornada es que la distancia del Sol a ambos polos es la misma haciendo que el día y la noche duren lo mismo. Pasado el 22 de septiembre, los días serán cada vez más cortos y en todo el hemisferio norte hará más frío.

El asesor científico del Museo de la Ciencia y el Cosmos de Tenerife, Alfredo Rosemberg, explica que "no es una cuestión de lejanía con el Sol, lo que determina que haga más frío, es el ángulo de incidencia de la radiación solar que va disminuyendo a medida que nos acercamos al invierno".

En cuanto a la visión de astros celestes, este otoño será ideal para observar Júpiter que será visible desde principios de noviembre produciéndose el momento de máximo acercamiento a la Tierra el 1 de diciembre. El planeta Saturno también podrá observarse durante esta estación aunque solo al anochecer -al principio del otoño- o al amanecer en los últimos días, cuando se acerque el invierno.

Rosemberg destaca la posibilidad de observar la lluvia de estrellas que se producirá el 13 de diciembre porque las Gemínidas se podrán observar "especialmente bien este año".

Otra de las características del otoño es la abundancia de las lluvias, algo que vendrá muy bien este año porque venimos de un verano muy seco. En las Islas Canarias, el verano ha sido extremadamente cálido, con temperaturas medias que en general se situaron entre 1 y 2º C por encima de lo normal. Además, el año hidrológico se ha caracterizado por la acusada escasez de precipitaciones . Esto significa que un otoño normal e incluso húmedo sería insuficiente para cubrir el déficit hídrico del año.

Con el otoño, aparte del enrojecimiento y la caída de las hojas de los árboles, comienza la época de las migraciones animales entra las que destacan las aves que son los únicos animales capaces de desplazarse miles de kilómetros para invernar. Canarias es un lugar óptimo de paso para estos animales, aunque el calentamiento global, el aumento de la sequía y el verano tan cálido que hemos tenido han variado las costumbres de algunas aves, que han establecido las islas más orientales del Archipiélago -Lanzarote y Fuerteventura- como su residencia otoñal habitual.

Pero no todas las aves son iguales, según Aurelio Martín, profesor de Biología Animal de la Universidad de La Laguna, "la mayoría de las aves autóctonas ya se han reproducido en esta fecha del año, pero aunque no las veamos anidando para procrear es una época muy interesante para observar su migración". Son aves que pueden recorrer miles de kilómetros desde los países escandinavos hasta Sudáfrica, donde invernan muchas de ellas. Otro grupo se instala en el sur del Sahara.

En esta estación tan poco proclive para la reproducción, hay una excepción. El Painho de Madeira, que es la única especie que viene a Canarias para criar en otoño.

Con el aumento de las temperaturas de los últimos años se han producido cambios en los hábitos migratorios. Hay especies que no llegan ni a salir de la Península, las cigüeñas solían llegar al sur de África y ahora muchas de ellas se quedan en el Archipiélago.

El otoño también afecta a la floración de las plantas. En esta estación, la actividad vegetal se frena. En este aspecto, Canarias de nuevo es una excepción, porque el clima permite que las plantas se desarrollen casi todo el año.