Los trabajadores del Cabildo de Gran Canaria realizaron ayer una sonora protesta en el patio central de la Casa Palacio por la decisión del gobierno tripartito de Antonio Morales de mantener la jornada laboral presencial a todos los empleados, lo que a juicio del sindicato Sepca contradice los llamamientos de la autoridades a trabajar desde casa.

La rebelión laboral, realizada antes del mediodía con golpes a las vallas metálicas, obligó al presidente a aprobar un decreto de medidas organizativas excepcionales que establece que "el personal de los servicios esenciales del Cabildo debe acudir a sus puestos de trabajo en su totalidad, salvo posibilidad de teletrabajo que se valorará en cada caso, mientras que del resto de los departamentos solo deben acudir los jefes de servicio y sección, una medida que tendrá una vigencia de 48 horas, es decir, martes y miércoles".

En una nota, el gobierno tripartito explicó que se trata de la decisión que tiene "el objetivo de reorganizar el trabajo de todos los departamentos insulares de modo que queden garantizados, de un lado, los servicios administrativos y públicos a la ciudadanía y, de otro, la seguridad sanitaria laboral y de la ciudadanía en estos momentos de contención del coronavirus". Acudirán también a trabajar el equipo de Gobierno, el personal directivo y el personal eventual que presta asesoramiento.

Los servicios considerados esenciales son los del área de Política Social, hogares y centros de menores, Instituto Social y Sociosanitario, casas de acogida de la mujer, Cecopin, Emergencias, Consorcio de Emergencias y técnico de Medio Ambiente, el dispositivo de prevención y extinción de incendios y el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre.

Asimismo, lo son el mantenimiento y conservación de carreteras, el Matadero insular, y el Consejo Insular de Aguas.

En las próximas 48 horas, cada servicio del conjunto del Cabildo, sus entes y organismos deberá presentar la reorganización de sus departamentos previendo una duración mínima de dos semanas y, de cualquier modo, el periodo que dure el estado de alarma decretado en el país.

En todo caso, cada persona debe cumplir el protocolo establecido para personas que presenten síntomas o estén en riesgo, que hayan estado en contacto con posibles contagiados, y todas las medidas de higiene recomendadas, un protocolo que el Cabildo aplicará igualmente en todas sus áreas.

Sindicato

Por su parte, el sindicato Sepca consideró que el coronavirus muestra "la nefasta gestión de la situación de alerta de los irresponsables políticos del Cabildo". "Desde esta organización sindical no podemos hacer otra cosa que manifestar nuestro descontento y enfado con la gestión de esta alerta, como así nos lo trasmiten la inmensa mayoría de los compañeros".

Tras recordar que desde el viernes se anunció por el presidente Pedro Sánchez su intención de declarar la situación de alarma el sábado, con la principal medida y recomendación de quedarse en casa, Sepca señaló que las demás administraciones empezaron a tomar medidas urgentes y el propio Morales emitió un vídeo desde su casa solicitando a la población de Gran Canaria el teletrabajo. A juicio del sindicato, juicio, el domingo hubo una reunión entre responsables políticos y altos funcionarios y "su principal medida" fue no adoptar solución alguna de carácter urgente y posponer las decisiones al lunes.