Canarias despide al invierno más seco y caluroso de las últimas seis décadas

Canarias sufrió este invierno su séptima temporada más cálida y la duodécima más seca desde la serie histórica que comienza en 1961, según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), cuyo responsable en Canarias, David Suárez, cree que la tendencia al calentamiento es «clara». En una rueda de prensa ofrecida este jueves, Suárez ha aseverado que para 2050 se prevé que el número de días de lluvias se reduzcan 10 o 15 días al año en las Islas, mientras que las noches tropicales, aquellas con temperatura mínima por encima de los 20 grados, se duplicarán, conforme a las proyecciones y modelos que manejan.

«Las olas de calor serían más extensas y las temperaturas estarían 1 o 1,5ºC por encima de lo habitual. La tendencia del calentamiento global es clara. Si los alisios se debilitan, podemos tener más entradas de componente este, menos nubosidad y aumento de temperaturas», ha advertido Suárez.

En el cómputo global, este invierno en Canarias, según el delegado territorial de la Aemet, ha tenido un carácter «muy cálido» con una anomalía de 0,8 grados por encima de la media durante el trimestre.

Suárez también ha destacado que ha sido un invierno «marcado» por los episodios de calima, con 20 días en total en los que se ha reducido la visibilidad por debajo de los 10 kilómetros. En este sentido, ha recordado que los de enero, que se prolongó durante casi diez días, y el de principios de febrero, que se pudo detectar en todas las estaciones de la Aemet y duró más de lo habitual.

«Ha sido un invierno anómalo en cuanto a la calima, con episodios largos, por encima de los valores normales. Lo normal es que los episodios duren en torno a dos días de promedio, mientras que este año han durado entre cuatro o cinco días. Es anómalo», ha reflexionado Suárez.

También ha comentado que la calima de este jueves es la misma que ha pasado por la península esta semana, en una situación que ha calificado de «muy curiosa». Este polvo sahariano, ha abundado, se encontraba al norte de la península Ibérica y ha circulado hasta entrar en Canarias por el norte, lo que ha generado «dificultades» en los modelos de predicción, que no han detectado bien esta situación. «No es habitual porque se trata de una recirculación secundaria. Tampoco es normal que la calima entre por el norte, sino por el este o sudeste», ha declarado el meteorólogo.

Respecto a las precipitaciones, el trimestre invernal en Canarias ha sido «muy seco», muy por debajo del promedio. «Se ha acumulado un 53% de lo esperado. Diciembre ha contado con un acumulado del 22% frente a lo previsto, lo que significa que ha sido un mes muy seco, mientras que enero y febrero fueron normales. En cuanto a las temperaturas, la primera mitad de diciembre se situó por debajo de la media mientras que la última parte del mes estuvo «muy por encima». Durante febrero, en medio de los episodios de calima, hubo anomalías de hasta cinco grados por encima de la media, mientras que en enero se registró un mes de carácter cálido, con anomalías de 0,8 grados por encima de la media, con una temperatura promedio de 15,4 ºC.

En general, ha relatado David Suárez, en todas las islas aparecen anomalías por encima de la media, especialmente en el interior de Gran Canaria, donde se registró la temperatura más alta del trimestre, con 33,2 ºC en La Aldea. En cuanto a las precipitaciones en forma de nieve, el episodio más importante ocurrió en Izaña (Tenerife) y estuvo asociado a una vaguada atlántica a finales de enero. De la serie entre 2003 y 2020, las caídas de nieve están ligeramente por encima de lo normal, pero dentro de la media.