Anna Estival: «Ya hemos empezado a hacer biopsias líquidas en el Hospital Insular»

La doctora Anna Estival pone en valor la innovación que han experimentado los tratamientos para abordar el cáncer de pulmón en los últimos años

La doctora Anna Estival en su consulta del Hospital Insular.

La doctora Anna Estival en su consulta del Hospital Insular. / Juan Castro

¿Cómo han evolucionado los tratamientos del cáncer de pulmón en los últimos años?

Sobre todo ha habido avances en dos frentes. Por un lado se encuentra la inmunoterapia, que ha mejorado la supervivencia de muchos pacientes, incluso en aquellos casos en los que el pronóstico es muy desfavorable. Por otro, los tratamientos dirigidos, que se pueden aplicar cuando conocemos más detalles de la biología de los tumores. Hay que señalar que todos los cánceres de pulmón no se tratan igual, por lo que no nos quedamos solo con saber el tipo de tumor, también analizamos si presenta alguna mutación. Para eso hacemos un estudio de biología molecular buscando alteraciones para que los pacientes puedan recibir un tratamiento más individualizado. De este modo, si detectamos alguna mutación, podemos aplicar una terapia dirigida contra ella. Estos tratamientos son orales y se enfocan en las células tumorales, lo que hace que sean más eficaces y que provoquen menos efectos secundarios. Lo cierto es que cada vez vamos conociendo más mutaciones y tenemos más fármacos dirigidos contra ellas. Por ejemplo, en el último congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO), que se celebró en octubre en Madrid, se presentó un medicamento inhibidor una mutación –RET– que solo está presente en el 1% de los casos pero tiene unas probabilidades de respuesta tumoral (reducción del tumor) del 80%. Esto es muy importante, ya que aunque afecte a una minoría, esos pacientes que se puedan beneficiar mejorarán de forma significativa su calidad de vida al tener controlada la enfermedad y sus síntomas. Hace pocos meses se creó un laboratorio de biología molecular en nuestro centro. En él, podemos hacer estudios más exhaustivos de estas mutaciones.

Estaba previsto que comenzaran a hacer biopsias líquidas en el Insular a principios de verano, pero el proyecto sufrió retrasos. ¿Ya han empezado a realizarlas?

Sí, por fin hemos empezado a hacerlas. Las biopsias líquidas nos permiten buscar mutaciones en sangre sin necesidad de rebiopsiar a los pacientes por el método tradicional. Esto hace que el proceso sea más sencillo, mucho menos invasivo y que podamos repetirlo con más asiduidad. Hemos comenzado a practicarlas en enfermos que ya conocemos que presentan mutaciones y las repetimos cada vez que se hacen un TAC o se someten a un cambio de tratamiento. 

Más del 60% de los cánceres de pulmón se diagnostica en fase metastásica. ¿Cuánto han conseguido aumentar la supervivencia de los pacientes las nuevas terapias?

En estos casos, la inmunoterapia ha jugado un papel fundamental. De hecho, ha conseguido que los pacientes metastásicos alarguen su supervivencia. Ya un 20% logra vivir más de dos años y entrar en una fase de control, algo que hace tan solo tres años era impensable. 

«La inmunoterapia ha logrado alargar la supervivencia de pacientes metastásicos»

Ya hay 11 hospitales españoles que cuentan con el visto bueno de sus comités de ética para iniciar el cribado del cáncer de pulmón, una iniciativa que se enmarca dentro del proyecto Cassandra. El Hospital Ramón y Cajal ha sido el primero en comenzar. ¿Cuándo se prevé que arranque esta actividad en el Insular?

Aquí nos encontramos con dos bandos. Uno de ellos lo conformamos los médicos, que estamos muy concienciados sobre la importancia del diagnóstico precoz. Y es que en Canarias, el 75% de los casos de cáncer de pulmón se diagnostica en fase avanzada, es decir, cuando no podemos recurrir a la cirugía, lo que nos preocupa muchísimo. La otra parte la pone el bando político, que está estudiando la costoefectividad del proceso. Hay que tener en cuenta que el hecho de hacer más tacs requiere que más médicos tengan que informarlos, que haya más hueco para realizar las pruebas y que un especialista visite a los pacientes posteriormente. Esto no se puede hacer con la capacidad que tenemos ahora, por lo que están analizando la situación.

Esta neoplasia suele cursar de forma asintomática durante muchos años. Ahora bien, cuando se manifiestan síntomas, ¿cuáles son las señales que pueden alertar de la presencia de la patología?

La manifestación de tos persistente que no mejora, la presencia de dolor torácico y la sensación de ahogo. A todo esto se suman las infecciones respiratorias que se repiten o que no mejoran durante semanas. En pacientes fumadores, todos estos síntomas hay que tenerlos mucho más en cuenta. 

¿Las personas fumadoras deben informar a los médicos de cabecera de que mantienen este hábito?

Por supuesto, pero no solo informar, también debe ser el primer profesional al que se le consulte cuando aparezca un síntoma. Después, en función de los riesgos y del cuadro que presente cada paciente, deberá solicitar una radiografía de tórax y, a partir del resultado, derivarlo a un diagnóstico rápido de cáncer de pulmón. 

«Se está analizando la costoefectividad del cribado de cáncer de pulmón en Canarias»

¿Quiénes conforman el perfil mayoritario de pacientes diagnosticados?

Los hombres fumadores con una media de edad que ronda los 65 años. 

Sin embargo, cada vez hay más cuadros en mujeres...

Es cierto, ahora estamos viendo un incremento de cáncer de pulmón en mujeres por culpa del tabaco.

El tabaco sigue siendo el responsable del 80% de los casos de esta enfermedad. ¿Cómo se puede reforzar la lucha antitabáquica?

La Fundación Canaria de Cáncer de Pulmón ha participado este año en muchas campañas destinadas a luchar contra el tabaquismo. Una de ellas está centrada en ayudar a prohibir fumar en espacios públicos. Otras, en cambio, están enfocadas en concienciar a la gente joven sobre los peligros que tiene este hábito para evitar que empiecen a fumar. Lo cierto es que se están desarrollando muchas acciones, pero hace falta más apoyo por parte de los gobiernos y ser mucho más restrictivos en los espacios públicos.

¿Son iguales de nocivos los dispositivos de vapeo y los que funcionan sin combustión que los cigarrillos convencionales?

 Al principio se presentaban como una alternativa al tabaco estándar y como una forma más moderna de fumar, pero cada vez están saliendo más estudios que sugieren que pueden ser nocivos y que las micropartículas que sueltan pueden estar relacionadas con daños pulmonares y con el desarrollo de cáncer. 

¿Cree que se impulsan los suficientes ensayos clínicos en Canarias?

Creo que cuesta mucho impulsar la investigación en Canarias. En mi caso, vengo de Barcelona y puedo decir que ahí el desarrollo de la investigación está mucho más apoyado que en las Islas. Por suerte, ahora mismo trabajo en un hospital que es pionero en investigación a nivel nacional e internacional. Tanto es así, que hemos tenido la opción de tener ensayos con inmunoterapia antes y después de la cirugía, algo que ahora se está empezando a aprobar. Nuestros pacientes, en cambio, han podido recibir este tratamiento desde hace cinco años gracias a los ensayos. 

¿Por qué tardan tanto en llegar a España los tratamientos oncológicos que se aprueban en Europa?

Básicamente, por las regulaciones de cada país. El problema no es solo que tarden en llegar a España, sino que cuando lo hacen, no están disponibles al mismo tiempo en todas las comunidades autónomas. Esto es inadmisible, pues las aprobaciones deberían ser rápidas y unánimes en todo el territorio. 

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