Si tienes estas enfermedades, no podrás renovar el carnet de conducir en 2024
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha actualizado el listado de enfermedades incompatibles con la conducción
La DGT no para de actualizar su normativa con el objetivo de adaptarla a los nuevos tiempos y a todo lo que se va descubriendo y desarrollando en el sector de la seguridad vial. La seguridad en la conducción es una preocupación constante y, en este sentido, este organismo ha reforzado su compromiso al establecer nuevas regulaciones para conductores que padecen enfermedades crónicas o degenerativas. Estas medidas buscan salvaguardar la integridad tanto del conductor como de los demás usuarios de la vía pública.
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De acuerdo con las nuevas directrices, la DGT ha determinado que determinadas patologías pueden influir significativamente en la capacidad de conducción de una persona. Por lo tanto, se han establecido períodos de revisión y renovación del permiso de conducir, así como requisitos adicionales para garantizar la seguridad vial.
Entre las principales modificaciones, se destaca que para aquellos conductores que han sido sometidos a cirugías importantes, como la disección, la renovación del permiso de conducir estará sujeta a un período de seguimiento más riguroso.
La DGT dispara la retirada del carné de conducir por estas infracciones graves
Del mismo modo, quienes hayan experimentado episodios cardíacos graves, como un infarto agudo de miocardio, deberán esperar un tiempo específico antes de volver a conducir y someterse a evaluaciones periódicas para verificar su aptitud.
Diferentes enfermedades
Además, se han establecido intervalos de renovación diferenciados para pacientes con diversas condiciones médicas, como epilepsia, diabetes mellitus insulinodependiente, trastornos del sueño, entre otros. Estas decisiones se basan en el tiempo transcurrido desde el diagnóstico, el tipo de tratamiento recibido y la evaluación del riesgo individual.
La DGT recalca la importancia de que los conductores sean conscientes de su estado de salud y de cómo este puede afectar su capacidad para manejar un vehículo de manera segura. Asimismo, se enfatiza en la responsabilidad de los profesionales médicos en la emisión de informes precisos y actualizados que reflejen el estado de salud del paciente y su idoneidad para conducir.