El Archipiélago registró el mes de febrero más cálido desde el año 1961

El avance de la Agencia Estatal de Meteorología detecta una anomalía térmica de tres grados centígrados y las precipitaciones se quedaron en un 23% de las esperadas

La Aemet señala que el pasado mes fue muy seco y con un 23% menos de las precipitaciones esperadas. | | LP/DLP

La Aemet señala que el pasado mes fue muy seco y con un 23% menos de las precipitaciones esperadas. | | LP/DLP / Europa Press

Europa Press

Canarias registró en el presente año el mes de febrero más cálido desde que arrancó la serie histórica en 1961, con una anomalía térmica de tres grados centígrados, lo que confiere a ese mes el carácter de extremadamente cálido, según recoge el Avance Climatológico de Canarias de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) hecho público en la jornada de ayer.

Además, el valor medio de las precitaciones acumuladas fue de 8,6 litros por medio cuadrado, lo que representa el 23% del valor esperado, que sitúa a febrero como un mes pluviométricamente seco, el decimotercero más seco desde 1961.

En total, el Archipiélago constató hasta una treintena de noches tropicales en casi una veintena de estaciones meteorológicas en todas las islas y la temperatura más alta se alcanzó en La Aldea de San Nicolás, en Gran Canaria, con 31,2 grados centígrados el pasado 8 de febrero.

Igualmente se superaron los 30 grados centígrados en los municipios de Antigua (Fuerteventura), Tías (Lanzarote) y Arico (en el sureste de Tenerife).

Borrasca Karlotta

En cuanto a las lluvias, el acercamiento de la borrasca Karlotta dejó precipitaciones, en general, débiles, en todas las islas, excepto en Gran Canaria, y los mayores registros se produjeron en La Palma, El Hierro y el norte de Tene- rife.

A partir de la jornada del 23 de febrero, el anticiclón atlántico se situó al noroeste de Azores, generando un intenso flujo de norte noreste sobre las islas que provocaron un notable descenso de temperaturas, así como la llegada de sucesivas masas de aire con mayor espesor y contenido de humedad, que dejaron precipitaciones débiles, localmente moderadas en algunos casos, en la vertiente norte de las islas más montañosas, así como en el este de Gran Canaria y pequeños volúmenes en Fuerteventura y Lanzarote.

En la cumbre y medianías orientadas al norte de Gran Canaria las precipitaciones fueron más intensas y persistentes.

Asimismo, hasta el día 19 se produjeron varios episodios de calima y hubo avisos por viento con rachas máximas de hasta 100 kilómetros por hora.