El truco para saber si un coche lleva un radar de la DGT

La Dirección General de Tráfico (DGT) no ceja en su intento por mantenerse actualizada con respecto a los adelantos tecnológicos que van surgiendo en el sector. Por ello, no solo renuevan constantemente la normativa de circulación sino que incorporan diferentes aparatos como radares de última generación, tanto móviles como inmóviles, a su plantilla.

Las multas por infracciones al volante están alcanzando un nuevo nivel de sofisticación con dichos artefactos. Estos no son otros que furgonetas camufladas, equipadas con cámaras y radares móviles, desplegadas en las calles para garantizar el cumplimiento de las normas de circulación.

Las nuevas furgonetas de la DGT, con radar integrado, se suman a la batalla contra estas infracciones, pasando desapercibidas entre el flujo de tráfico para detectar cualquier comportamiento peligroso al volante.

Captar infracciones

A través de las redes sociales, un conductor alertó sobre la presencia de una de estas furgonetas en Sevilla, donde una cámara montada en una de las ventanas vigilaba de cerca la velocidad de circulación. En una zona con límite de 50 kilómetros por hora, cualquier infracción era fácilmente captada por el dispositivo.

¿La DGT puede multar al pasajero de un coche?

Identificar estas furgonetas puede ser todo un desafío, pero existen algunas características distintivas. Por lo general, están conducidas por agentes de tráfico de la Guardia Civil, llevan matrículas con las siglas PGC y suelen ser modelos como la Renault Master, Fiat Scudo y Ford Transit Custom, en colores blanco, azul o negro. Además, los asientos están ligeramente elevados para brindar una mejor visibilidad a las cámaras, radares y ocupantes.

Con estas nuevas medidas de vigilancia, la DGT busca promover una conducción más segura y disuadir a los conductores de cometer infracciones que pongan en riesgo la seguridad vial. Sin embargo, los conductores deben estar atentos y cumplir siempre con las normas de circulación, ya que ahora, más que nunca, la mirada de la ley puede estar en cualquier lugar.