Un menor edad, residente en Alhucemas (Marruecos), fue la única víctima mortal del terremoto de 6,3 grados en la escala Richter que tuvo lugar ayer a las 04.22 hora canaria al sur del mar de Alborán, frente a las costas de Alhucemas, y que se sintió con fuerza en el norte de Marruecos, Melilla y Andalucía, y otras zonas de España. Según fuentes de organizaciones no gubernamentales de dicha localidad marroquí, el niño de 12 años sufrió un ataque pánico al sentir un seísmo de tal magnitud y durante su traslado al hospital de Alhucemas falleció al sufrir un paro cardiaco.

Además, indicaron que se contabilizaron una decena de heridos, entre ellos, algunos que se lanzaron desde las ventanas de pisos ante el temor de que el terremoto tuviera los mismos efectos devastadores que los que tuvieron lugar el 24 de febrero de 2004, cuando un seísmo de fuerza 6,1 con epicentro en Alhucemas provocó más de 600 muertos y cerca de mil heridos.

También informaron las mismas fuentes de que algunas viviendas de Alhucemas notaron los efectos del temblor en forma de caída de fachadas y techos, sobre todo en las zonas rurales, donde las viviendas son más endebles.

Por último, las fuentes de organizaciones no gubernamentales señalaron que como medida de precaución, ayer lunes fueron suspendidas las clases en el Colegio Español Melchor de Jovellanos de Alhucemas, dependiente del Gobierno español, al igual que ocurrió en el Colegio Español Lope de Vega de Nador (Marruecos).