Un hombre de 33 años, vecino de Zaragoza, ha protagonizado uno de los sucesos más surrealistas de lo que va de año. El afectado apareció el pasado viernes por la tarde paseando ensangrentado por una céntrica calle de la capital aragonesa y con su pene metido en una bolsa, según han confirmado fuentes cercanas al caso. Fue auxiliado por agentes de la Policía Local que se acercaron al verle lleno de sangre en una céntrica calle de la capital aragonesa.

Fuentes cercanas al caso han detallado que el hombre aseguró que la amputación se la había hecho él mismo. No obstante, se ha abierto una investigación para indagar las circunstancias de lo ocurrido y si pueden haber terceras personas implicadas en el caso. La Policía Judicial está tomando declaración a los allegados del lesionado.

Las fuentes policiales no descartan de que sea fruto de un problema psiquiátrico o que guarde relación con el consumo de ciertas sustancias estupefacientes. Precisamente, las pesquisas policiales realizadas hasta el momento apuntan a que el hombre se seccionó el pene él mismo.

Fuentes sanitarias no han dado información alguna sobre el estado de salud del hombre, y tampoco han detallado si se le ha logrado reimplantar el pene después de que los agentes lo llevaran al hospital.