«La gente le decía que parase, pero siguió adelante». Testigos del doble atropello en el barrio de La Feria de Las Palmas de Gran Canaria a unos hermanos de 10 y 12 años el lunes señalan que el conductor que supuestamente se los llevó por delante cuando cruzaban un paso de peatones se fugó sin hacer ningún intento por prestarles ayuda. El niño y la niña continuaban ingresados en el hospital. Mientras, el hombre de unos 68 años, que también reside en el popular barrio, fue detenido poco después a poca distancia del lugar de los hechos, y en la prueba de alcoholemia dio positivo.
El atropello tuvo lugar a las 13.40 horas del lunes, poco después de que sonara el timbre y se abriesen las puertas del colegio público José Pérez Pérez, situado en la trasera del centro comercial Parque Atlántico de la Feria, para que los escolares regresaran a sus casas a almorzar.
«Fue un golpe tremendo y estamos impactados todavía por lo que pasó», admite una testigo
Como era frecuente, los hermanos iban juntos y se dirigieron hasta el paso de peatones situado en la calle Diego Betancor Suárez, a la altura del centro comercial, y un coche que subía en dirección al recinto ferial los embistió cuando iban a cruz la vía por el paso.
El niño de 10 años quedó sobre el capó del vehículo y salió despedido a varios metros del lugar, golpeándose la cabeza. «El niño voló, y llegó hasta la altura de una farola que está por encima (en referencia al punto de luz que está a unos 10 metros), y lo peor fue el impacto de oír el sonido del taponazo en el suelo de la cabeza», detalla una testigo a este periódico.
Su hermana, de 12, fue alcanzada en una pierna por el mismo automóvil. A pesar de todo, hay quien afirma que ella, tras lo sucedido trataba incluso, de localizar a su hermano pequeño.
Vecinos apuntan que el hombre ya se había saltado poco antes la rotonda que está a pocos metros
Según distintas fuentes, ambos estaban a mediodía del martes recuperándose bien de las lesiones en el Hospital Universitario Materno Infantil de Canarias, y la niña iba a ser operada durante la jornada de la rotura del fémur.
El conductor se dio a la fuga, si bien tras las descripciones aportadas por los testigos y una batida policial permitió localizar al vehículo en las inmediaciones y, con ello, la Policía Local cerró su detención.
«Al ver el accidente los vecinos le pedían al conductor: ‘¡Por favor párate!’, pero no hizo caso y siguió adelante sin hacer caso y viendo lo que había pasado». Otras personas que estaban en las inmediaciones declaran haber visto al chófer instantes antes que se había saltado la pequeña rotonda situada en una intersección, a unos pocos metros por debajo, lo que puede dar una posible idea de las supuestas condiciones con las que iba conduciendo.
«Nos quedamos todos impactados, y La Feria está impactada», señalan en el lugar, mientras en distintas conversaciones se seguía este martes hablando de todo lo sucedido el lunes a mediodía, mientras alguno recriminaba al supuesto autor que no quisiera socorrer a los dos pequeños.
«Podía haber sido mucho peor, porque el golpe fue tremendo».
La Policía Local confirmaría oficialmente el lunes que el supuesto autor del doble atropello había bebido y que la prueba de alcoholemia que se le realizó dio resultado positivo.
La noticia ha dejado sobresaltado a este popular barrio capitalino, que está viviendo con angustia el doble atropello. Y, encima, porque el supuesto autor del accidente es un residente también del barrio, según coinciden vecinos y fuentes policiales. Una de las personas llegaba a situar su casa cerca del lugar de los hechos, en uno de los bloques.
Los niños son también conocidos en el barrio y en el propio centro comercial, por lo que la noticia ha dolido todavía más en La Feria.
El conductor se enfrenta ahora a la comisión de un posible delito múltiple. Por un lado, el propio del accidente con heridos en un paso de peatones, por otro a la omisión del deber de socorro de los dos niños por fugarse del lugar y, por último, al hecho de que la prueba de alcoholemia diera positivo.
