La Fiscalía ve indicios para procesar por asesinato a la pareja de Juana Ramos

La Fiscalía ha solicitado este martes que se procese por asesinato u homicidio a Miguel Ángel Ramos, expareja de la desaparecida Juana Ramos, porque aprecia suficientes indicios probatorios y contradicciones en sus declaraciones para justificar la apertura del juicio oral. El Ministerio Público, al igual que la familia de la supuesta víctima, considera que las pruebas aportadas a la causa también apuntan a la existencia de un delito contra la integridad moral. Por su parte, la defensa ha reclamado que se archive la causa en contra del investigado y ha insistido en que "se respete la presunción de inocencia".

María Auxiliadora Díaz, magistrada titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Las Palmas de Gran Canaria, citó a las partes este martes para que concretaran sus imputaciones en una comparecencia que marca un punto clave para la fase de Instrucción. Las pesquisas del caso acumulan más de ocho años desde que la vecina del barrio de La Paterna fuera vista por última vez el 20 de agosto de 2016.

Búsqueda de Juana Ramos en Arucas (10/05/2021)

Las partes tienen ahora un plazo para solicitar la práctica de nuevas pruebas antes de que la magistrada decida si abre juicio en contra del inculpado o, por el contrario, marca el sobreseimiento de la causa. Alberto Hawach, abogado de la familia, ha avanzado a los medios de comunicación que pedirá algunos indicios documentales que "ya deberían constar en la causa", pero matiza que, debido al extenso procedimiento, "muchas de las pruebas que se podían solicitar ya se han pedido".

Imágenes del juicio por el asesinato de Juana Ramos

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"El sobreseimiento hubiese sido un varapalo"

"La familia está bastante contenta con que se haya dado este paso porque un sobreseimiento de la causa hubiese sido un varapalo a nivel anímico. Ya no se qué más se les puede pedir", aseguró Hawach.

Miguel Ángel Ramos entró a la Ciudad de la Justicia a las diez menos cuarto de la mañana mientras se apoyaba en unas muletas para caminar, con vendajes en la pierna, pero no quiso dar ninguna declaración a los medios de comunicación allí presentes.

"A pesar de los enormes esfuerzos de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, a quienes una vez más la familia envía sus agradecimientos eternos, no se ha podido dar con el paradero del cadáver de Juani, porque ellos están plenamente convencidos de que a Juani se le quitó la vida en la noche del 20 al 21 de agosto de 2016", manifestó el letrado de la acusación particular. 

La familia está plenamente convencida de que a Juani se le quitó la vida

El caso está marcado por la complejidad que supone, en general, dictar una sentencia condenatoria sin que los médicos forenses tengan oportunidad de analizar el cuerpo para recabar información sobre cómo se pudo producir el crimen. El abogado de la familia indicó que "hay algún precedente en España, pero también es cierto que este es un tema que se tiene que dilucidar en base a la prueba indiciaria".

Entre esos indicios a los que aluden las acusaciones para seguir adelante con el procedimiento figura una nota que escribió Miguel Ángel Ramos a su expareja, Juana Ramos, en la que le explicaba que se deshizo de su alianza matrimonial y la tiró a una cueva semisumergida con plomo para que se hundiera. A pesar de que el único sospechoso del crimen negó su autoría frente a la magistrada, la prueba caligráfica reveló "sin ninguna duda" que fue él quien la redactó. 

"No hay familiares ni amigos, solo son de conveniencia"

Las partes también aportaron otras correspondencias entre el investigado y su presunta víctima, que fueron encontradas en la vivienda de ella. Las cartas estaban escritas en papeles, facturas y hasta un paquete de cigarros y reflejaban, según fuentes cercanas al caso, que su exnovio intentaba convencerla de que los dos estaban solos, supuestamente con la intención de que se alejara de su entorno más cercano, con expresiones como: "No hay familiares ni amigos, solo son de conveniencia". 

El sospechoso de matar a Juana Ramos incumple las medidas cautelares

Dos amigas íntimas de la mujer desaparecida declararon en fase de Instrucción que sufría malos tratos, violencia verbal y un seguimiento y acoso por parte del investigado. El origen de los problemas en la pareja se encontraba, según las testigos, en la deuda económica que supuestamente generó Miguel Ángel Ramos por su gestión de una pizzería de la capital grancanaria en la que era titular la supuesta víctima. Juana Ramos debía abonar 500 euros cada mes para poner al día las cuentas del negocio, pero era el inculpado quien respondía al pago. Sin embargo, las amigas de la mujer aseguran que él amenazaba con dejarle de pagar las cuotas de la deuda si lo dejaba.