Telde cuenta con un millón de metros cuadrados de zonas verdes a lo largo de todo su territorio y el objetivo municipal es que esta extensión siga creciendo durante los próximos años. La lucha contra la desertización de los espacios públicos está en marcha, pero para facilitar que esta misión pueda seguir ejecutándose es preciso impulsar proyectos colaterales que garanticen su desarrollo sostenible.
Por este motivo, el Ayuntamiento ha redactado un proyecto para abastecer los parterres y jardines con agua regenerada. Es decir, aguas residuales sometidas a un proceso de depuración especial para usarse principalmente en riegos. Esta actuación consistirá en la sustitución de las conexiones principales de las redes de distribución, que reparten agua de abasto (la misma que se utiliza para las viviendas) por otras que conecten directamente con la depuradora de Barranco Seco, desde donde parte el agua reciclada. En concreto, se verán afectados puntos estratégicos de la localidad como el casco, la costa o el barrio de Jinámar.
Los trabajos tienen un coste de 1,6 millones, que serían aportados por el Gobierno de Canarias a través de subvenciones europeas. La financiación no está cerrada, pero desde el Gobierno local aclaran que en caso de que no saliese adelante buscarían por su cuenta el modo de sufragar los gastos porque consideran que este es un proyecto primordial dentro de la estrategia del mandato.
La administración rehabilitará los depósitos en el marco de esta actuación
El concejal Álvaro Monzón, que impulsa estos trabajos a través del área de Parques y Jardines, defiende también que el cambio supondría un importante ahorro económico al año. El presupuesto municipal ha previsto hasta ahora un gasto anual de 396.674 euros (1,1 euros por metro cúbico), mientras que con este sistema se rebajaría a 144.245 euros. La diferencia supera los 250.000 euros.
Según los datos aportados por el Consistorio, el consumo de agua actual alcanza los 360.613 metros cúbicos al año. Con esta cantidad se riegan el millón de metros cuadrados de zonas verdes con las que cuenta la localidad. Sin embargo, en un estudio efectuado por los técnicos municipales se ha detectado que solo 12 contadores consumen el 75% del total. Estos puntos coinciden en su mayoría con zonas de césped y grandes masas boscosa. Por otro lado, para sustentar estos espacios departamento calcula que deberán ejecutarse un total de 11 actuaciones, entre las que se incluye el impermeabilizado de estanques municipales; la rehabilitación y adecuación de depósitos; el tendido de redes nuevas y prolongaciones y reutilización de redes antiguas, entre otras acciones.
En concreto, el proyecto resaltan seis conexiones; Lomo la Francia, en Jinámar; la conexión EDAR Hoya Pozo y La Cinsa en la costa; la conexión de Bachilleras en la circunvalación; las ramblas de Arnao, que serán conectadas por San José de Las Longueras; la finca finca rústica de Calacio, para sustentar a las medianías del municipio y finalmente el cono sur.