El Ayuntamiento invertirá casi dos millones de euros en el asfaltado de un centenar de calles del municipio entre este y el próximo año, con actuaciones previstas a través del Plan de Cooperación del Cabildo insular y una modificación del plan de rehabilitación de las viviendas del Valle de Jinámar con la que podrán rebachear la calle Fernando Sagaseta, ubicada en este sector.
En concreto, el Pleno aprobó por unanimidad destinar 1,5 millones de euros que ha concedido la institución insular únicamente a la pavimentación y mejora de las vías del municipio durante la anualidad del 2023. En total serán beneficiados 14 barrios por este proyecto, aunque el Gobierno local no especificó cuáles. Esta fuera de las críticas de la oposición a la hora de debatir el punto, que acabó aprobándose por unanimidad.
"Si hiciésemos una encuesta sobre la mejora de los servicios, el asfaltado de las calles sería la primera de las demandas de la ciudadanía", expresó ayer la alcaldesa, Carmen Hernández, durante el debate del punto, para justificar la necesidad del Gobierno de emplear una partida económica tan grande en la mejora de la red viaria.
El concejal de Vías y Obras, Eloy Santana, destacó a su vez que esta acción permitirá que se continúe desarrollando el plan de asfalto de la ciudad, por el cual han podido arreglar unas 240 calles mediante la inversión de cuatro millones de euros desde el año 2015. Asimismo, cabe subrayar que el Gobierno invirtió solo en el último año un millón de euros para la repavimentación de unas cien calles.
La oposición coincidió en la necesidad de que se llevase a cabo esta gestión, aunque criticó que el Gobierno local llevase directamente la propuesta a la sesión plenaria sin antes haber consultado con ellos. "Lo han traído a Pleno de forma unilateral sin tener en cuenta que este proyecto se desarrollará en la anualidad del próximo año, en la que pueden estar gobernando otros partidos", concretó Juan Antonio Peña, portavoz de Ciuca.
Soledad Hernández, del Partido Socialista, solicitó que se dieran a conocer las zonas en las que se procederá actuar y los criterios que avalan la selección de estos espacios y no de otros. "Por transparencia", rogó la concejala. En este sentido, la mandataria recordó que los técnicos eran los encargados de elegir las calles en las que se trabaja. "Depende del estado en que se encuentren las carreteras, del número de habitantes del barrio y el nivel de rodadura", concretó la regidora.
Por otro lado, en la misma sesión también se sacó adelante una modificación del ARRU del Valle de Jinámar, por la cual la administración local utilizará 370.000 euros de remanente del proyecto de rehabilitación de las viviendas para arreglar la calzada de la calle Fernando Sagaseta, una de las más transitadas de este barrio. "No es habitual que en un proyecto así sobre dinero, ni que se aprueben actuaciones colaterales para mejorar el entorno de los edificios. Esto demuestra la buena gestión de la empresa Fomentas", quiso aclarar sobre el punto la alcaldesa, que resaltó también la importancia del proyecto al ser una de las demandas históricas de la ciudadanía.
De hecho, el mal estado de la vía ha generado en numerosas ocasiones quejas e incluso acciones de protesta entre los residentes. Hace tres años que uno de los vecinos de los edificios ubicados en esta zona decidió plantar árboles en los baches, para resaltar lo profundo que estos eran (y siguen siendo). El residente apareció una mañana con tierra y pequeños ejemplares de lavanda y grabó el proceso de trasplante. El vídeo se viralizó en las redes sociales, pero no causó ninguna reacción inmediata por parte de la institución municipal.
Sonsoles Martín, portavoz del Partido Popular, preguntó si con este proyecto se podría arreglar toda la vía. "Se asfaltó en su momento una primera parte, pero todos nos quedamos esperando a que se llegase al final", recordó. En este sentido, el concejal Servando González, responsable del área de Vivienda, aseveró que buscarían la fórmula para que los fondos cubriesen todo el pavimento.
Finalmente, la portavoz de Unidas Podemos, Rosa Vega, quiso proponer que en el proyecto tuviesen en cuenta también la situación de las zonas peatonales. "Siempre las sitúan al lado de los contenedores, por lo que se reduce mucho la visibilidad y se producen situaciones de peligro", alegó. El punto también fue aprobado por unanimidad.
