IES José Frugoni Pérez: De las estrellas al huerto escolar

Cada vez son más los centros educativos que buscan nuevos modelos para captar la atención del alumnado y mantener su interés por las clases en un entorno en el que compiten con los teléfonos móviles y las redes sociales. En el caso del IES José Frugoni Pérez, conocido popularmente como La Rocha, ese cambio va acompañado de no encerrar las materias en las cuatro paredes de un aula y trasladarlas al exterior, a través de iniciativas innovadoras como un auditorio creado con materiales reciclados o un proyecto de astronomía para los estudiantes. Este tipo de actividades le han permitido obtener, junto a otros dos centros educativos de la Isla, el Distintivo de Excelencia del Gobierno de Canarias. 

El instituto poco a poco ha ido ampliando su oferta educativa, que este curso escolar cuenta con 20 proyectos en marcha, relacionados con el apartado más social y sostenible. Sin ir más lejos, a comienzos de este año el centro recibió como premio un kit fotovoltaico con una potencia de 1,8 kW, que ahora se encuentra instalado en su azotea, por la propuesta que presentaron en la II Feria Sostenible para el Clima y la Energía de Gran Canaria.

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Otro de sus proyectos más populares, que están desarrollando en un espacio ubicado junto al huerto escolar, consiste en construir un auditorio exterior a través de materiales reciclados. Entre Canastas es el nombre que recibe esta iniciativa, pues algunas de las piezas que conforman la estructura principal son canastas antiguas del patio, que se reemplazaron debido a que se encontraban en un estado muy deteriorado. Los propios estudiantes, que trabajan en la construcción de este lugar junto a sus padres y a sus profesores, han colocado una serie de troncos a modo de bancos para este espacio que irá destinado a debates, obras de teatro y exposiciones al aire libre. También servirá para integrarse en los alrededores del centro, que han recuperado su tono verde gracias al trabajo llevado a cabo por el personal del instituto.

"Yo llegué hace 10 años de forma accidental como profesora de matemáticas, y me di cuenta de que era un centro muy especial, con un carácter acogedor que te invita a un trabajo diferente", explicó Elena Santana, directora del instituto. Uno de sus principales retos al frente de la dirección fue acercar la ciencia a los estudiantes de otra forma, motivo por el que decidió empezar a ofrecer clases de astronomía con un especialista en la materia hace cuatro años. 

La actividad consiste en que los estudiantes hacen uso de un programa informático para descubrir estrellas variables, algo que les ha convertido en uno de los primeros centros educativos en avistar estos astros. El interés de los alumnos a la hora de desempeñar estas tareas les ha llevado a integrarlas en su día a día, logrando el hito de ponerle su nombre a una estrella. 

Universo La Rocha

Los proyectos conviven con otras iniciativas puestas en marcha por el centro que ya forman parte del mismo, como las premiaciones que realizan cada trimestre para incentivar el rendimiento de los alumnos. "Se trata de un micro universo, al que nosotros llamamos universo La Rocha, donde cada uno encuentra su sitio y se educa para desenvolverse en la sociedad, no solo como buenos profesionales sino también como buenos ciudadanos", aseguró Santana. 

La mejora de los resultados académicos prueba que las innovaciones educativas aplicadas en los últimos años están dando sus frutos. Sin ir más lejos, este curso académico una de las alumnas logró la codiciada beca de Amancio Ortega. Otras medidas, como incrementar la implicación de los padres con la figura del delegado de familia, marcan la oferta educativa del centro.

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