¿Cuál es el primer sentimiento que le invade cuando le hablan de la UD Las Palmas?
Primero de agradecimiento. Fue un año duro y difícil pero lo viví rodeado de grandes amigos y que resultó muy gratificante para mí. Guardo un recuerdo maravilloso.
¿Qué distinguió su etapa en Gran Canaria de otras que vivió en el banquillo?
Estuve rodeado de gente que ayudó muchísimo y nadie intentó poner ninguna traba en las labores diarias. Eso fue muy significativo para mí, es lo que más recuerdo.
¿Se refiere a la afición, al club, al vestuario...?
A gente del club, a la gente que me rodeaba y con la que trabajaba en el día a día, también a la dirección deportiva. Recuerdo un club muy volcado con el trabajo que estaba realizando y fue lo más diferente a otros equipos. Y luego por supuesto estuve muy cómodo en el tema deportivo por la plantilla y la afición. Pero el grupo de trabajo fue idóneo.
Dijo que aquí sufrió más presión que en el Real Madrid, ¿lo mantiene?
Bueno, entonces no conocía el banquillo del primer equipo del Real Madrid. Pero sí hubo mucha presión, era un año en el que la presión se palpaba en todo lo que estábamos realizando, el club tenía la urgencia de estar en Primera, se gastó mucho dinero durante varias temporadas y se notaba mucho la presión. Pero repito que fue un año de un trabajo muy bueno.
La promoción estuvo marcada por el 3-0 en la ida y la roja a Paqui. En la vuelta hubo atisbo de remontada ya que la UD ganaba 3-1 a 25 minutos para el final. ¿Qué ocurrió?
El partido de ida en Oviedo fue muy triste. El penalti sin que nadie se cayera en el área y la expulsión de Paqui lo recuerdo con mucha tristeza, fue el partido que nos marcó. Se hizo una temporada muy buena y solo nos faltó culminarla.
¿La UD de hoy en día le recuerda en algo a la que usted tuvo entre manos?
La temporada pasada vi más partidos que en esta. De momento solo vi el encuentro contra el Atlético de Madrid y luego resúmenes. Ese partido vi a un equipo muy parecido al de la temporada pasada, no sé si ahora con el nuevo entrenador cambiará. Todo me recuerda a mi año allí. Cuando veo la camiseta amarilla me acuerdo de mis vivencias en la Isla. Lo que menos piensas ahora es si este equipo se parece o no, pero fue un año muy bueno para mí.
¿Ve en Araujo a una especie de Turu Flores?
Es que no veo los partidos con esos ojos. También podemos hablar de Orlando... son muchos de los que me acuerdo. Me gustaría saber qué ha sido de muchos de ellos, de todos guardo un grato recuerdo. De Paquito por ejemplo, que fue un bastión en el equipo y en el vestuario. También Orlando, Socorro... jugadores con un comportamiento excepcional tanto en lo deportivo como en lo humano. De Cicovic también me acuerdo mucho. Fue un placer trabajar con todos ellos y por tanto, cuando veo una camiseta amarilla recuerdo un año muy gratificante.
Varios años más tarde le llegó la experiencia de entrenar al Real Madrid de Zidane, Ronaldo, Figo, Beckham, Raúl, Roberto Carlos, Casillas... ¿cómo fueron aquellos meses?
Fueron difíciles porque el club no atravesaba su mejor momento. Mi comportamiento fue el mismo y los jugadores también, lo que pasa es que el trabajo no fue exhaustivo porque jugábamos todos los miércoles y domingos. No había tiempo de hacer trabajos específicos. Fueron unas circunstancias difíciles y de hecho después salió el presidente. Fue un buen sitio pero no un buen momento.
Fue una gran responsabilidad y una gran presión. ¿Le dio tiempo a disfrutar?
Sí, siempre disfrutas. La profesión la tienes que tomar como un disfrute, no puedes estar todo el día sufriendo. Lo haces siempre con la mejor voluntad, como crees que las debes hacer, no como sugiere mucha gente.
Ahora que lleva varios años viendo el fútbol desde fuera, ¿ha cambiado mucho?
Muchísimo. El fútbol, como todo, va evolucionando. Ahora se trabaja mucho más tácticamente, casi todos los equipos le dan una prioridad táctica creo que en exceso. Se da menos a la improvisación del jugador. Antes se podía permitir dar más libertad al jugador de la que se les da ahora mismo.
¿Es el aspecto que más echa de menos con respecto a su etapa como futbolista?
Sí, sin duda, con respecto a mi etapa como futbolista y también a mi primera época como entrenador. Yo tenía, y sigo teniendo como concepto, que a los equipos, dentro de un orden táctico, cuando tienen la pelota hay que darle mucha más libertad al jugador. Y en los equipos grandes igual. Estamos viendo hasta a un Real Madrid encorsetado tácticamente incluso cuando tiene la pelota. Es la moda ahora en el fútbol.
Desde la distancia, ¿ve a la UD en el buen camino?
En el buen camino está porque se encuentra en Primera División y el trabajo de mezclar la cantera con otros jugadores que vienen de fuera siempre ha sido el sino del club y no lo debe abandonar. Este año tiene una prueba difícil, que es mantener ese espíritu en Primera División. Y no sé si habrá paciencia en ese aspecto, pero creo que la línea que tiene la debe mantener.
¿Percibe que con la política de cantera del último lustro está volviendo a la filosofía que le hizo grande?
Yo creo que nunca abandonó ese espíritu. En el año que estuve seguimos trabajando con la cantera entre semana, lo que pasa es que no siempre da los mismos resultados, hay veces que no salen jugadores. Y desde la distancia percibo que la UD no ha abandonado esa filosofía.
¿Hay algún jugador últimamente en la UD Las Palmas que le haya llamado la atención?
Yo ahora veo el fútbol de otra manera, no lo veo de manera tan meticulosa como para fijarme en los jugadores. Ahora me fijo más en los conceptos amplios. Este año puedo opinar menos, pero el año pasado vi a un muy buen equipo en general. Me gustaba mucho la plantilla y verles jugar.
¿Le sorprendió la destitución de Paco Herrera?
El fútbol no tiene memoria. Ascendió al equipo y jugando muy bien. En el fútbol se olvida todo muy rápido. No entro a valorar si era necesario o no, pero no hay que olvidarse de la gran temporada que hace. Y este año, aunque lo he visto menos, no se apreciaba a un equipo hundido. Me sorprendió un poco, pero desde la distancia nunca sabes lo que pasa dentro de un club.
¿Qué le ha parecido que Las Palmas haya elegido a Quique Setién como relevo?
Hizo una temporada muy buena en el Racing de Santander y también más tarde en el Lugo, y siempre cumplió con los objetivos. Y eso que en el Lugo era un equipo pequeño y lo mantuvo sin grandes apuros. Recuerdo haberme enfrentado con él cuando él entrenaba al Racing y yo al Córdoba y su manera de entender el fútbol ya entonces me gustaba mucho. Su estilo y el de Las Palmas casan bien, la mezcla suena bien. Va a tener que pelear contra equipos muy iguales por lo que se ve en las primeras jornadas.
¿Le ve opciones a la UD el sábado contra el Real Madrid?
No le veo muchas opciones. Juegan contra el líder, que es un equipo ofensivo aunque se diga que es defensivo. El Real Madrid ataca, y ataca muchas veces. Pero siempre, siempre en el fútbol hay opciones. Si Las Palmas hace un partido perfecto tendrá opciones de puntuar.
¿Qué diferencias le ve al Real Madrid de Rafa Benítez con respecto al del año pasado?
Cuando no tienen la pelota tratan de juntarse más para defender. Aparte de eso le veo igual porque se basan en grandes jugadores. El Madrid hay partidos en los que no juega bien pero tiene unas individualidades que te machacan. No hay muchas diferencias porque son prácticamente los mismos jugadores.
Como leyenda de la portería del Real Madrid que es usted [15 temporadas entre 1971 y 1986, con 7 títulos de Liga y dos Copas de la UEFA], ¿le está sorprendiendo Keylor Navas?
Mucho, me está sorprendiendo mucho. Cuando le vi jugar en Albacete me parecía un portero sensacional, pero siempre tienes la duda de si es idóneo para un equipo grande, porque son conceptos muy distintos. Me está demostrando que es muy bueno y está salvando al Madrid muchas veces.
