Tensión en Nervión. La operación del siglo para la UD afronta el tramo más dramático. El Sevilla endurece las negociaciones por Roque Mesa. El director deportivo de la entidad hispalense, Ramón Rodríguez Verdejo, 'Monchi', desveló ayer que la situación de compra del jugador teldense de 27 años aún está lejos de cristalizar. En punto muerto, solo la habilidad del presidente de la UD Miguel Ángel Ramírez podrá reconducir la mayor transacción en la historia de la entidad amarilla. "La distancia es importante", argumentó Monchi en la presentación del nuevo técnico sevillista Sampaoli.
Se trata de un argumento perverso del campeón de Liga Europa, que cerró hace 48 horas la venta del centrocampista polaco Krychowiak al PSG. En esa operación, el Sevilla se embolsó casi 30 millones de euros. Pero para la entidad de Nervión, tras dar el 'sí' a la operación de compra por Roque por diez millones -la cifra pactada con Ramírez- ha decidido ahora que el grancanario no vale la decena. Tras lograr la cesión de Kranevitter, que llega del Atlético de Madrid, mostró el presidente sevillista José Castro el nuevo escenario. Y es el de tensar la negociación.
"En el caso de Roque Mesa, es un jugador de nuestro gusto, pero las cosas tienen un valor. Creemos que es un buen futbolista y a día de hoy el valor que pensamos no coincide con lo que piensa su club. La distancia es importante", determinó Monchi. De esta manera, el Sevilla luce su mandíbula de acero en esta partida de ajedrez. La primera proposición de cinco millones de euros por el gladiador, fue rechazada de forma tajante por la UD Las Palmas.
La segunda, de 8,5 millones, fue recibida con agrado por la entidad isleña, que solicitó el último esfuerzo por el escudero total. Y tras anunciar, en los medios de la capital hispalenase, que se alcanzaría la barrera de los diez, con cláusulas y variables, ahora Monchi cambia las reglas del juego. "Las diferencias son importantes; pero es un futbolista que nos atrae y mucho. Cuenta con el visto bueno de la entidad y del entrenador", aseguró el ejecutivo.
En las próximas horas, el presidente de la UD Miguel Ángel Ramírez aterrizará en Gran Canaria con el agente de Roque Mesa, Luis Alonso. Tras acercar posturas en Miami, ahora deberán responder ante la pasividad del poderoso Sevilla.
Con un prespuesto de 100 millones, y con un ingreso extra de 25 'kilos', por disputar por segundo año consecutivo la Champions, la dureza negociadora del Sevilla se acepta con fair play en los despachos del Gran Canaria. "Ya sabíamos que no sería inminente (...); si no nos dan lo que quiere la UD [10 millones de euros], no se hará", determinan con puño de hierro en el galeón amarillo. Ya van 17 días de negociaciones, y con el acuerdo cerrado entre Roque y el Sevilla, falta el visto bueno de la UD para la operación.
Desde la entidad amarilla, la cifra de diez 'kilos' sigue siendo innegociable. El negocio del siglo no está descartado. La cumbre en la jornada de hoy, entre Ramírez, Alonso y el jugador, resultará clave. ¿Hasta dónde está dispuesta a llegar la UD? ¿Cederá el teldense en sus pretensiones y pondrá parte del abono del traspaso de su bolsillo? En referencia al segundo interrogante, el centrocampista de 27 años ya lo desmintió a este medio. "Son estrategias de los representantes".
El laberinto infernal del gladiador. Roque, que hoy debe completar el test médico (8.30), sigue a la espera del 'ok'. Está en juego el contrato de su vida. Y la mayor inyección de capital para la entidad isleña en un traspaso. El Sevilla se pone firme. La UD tiene un plan mágico. De Miami a la Isla. Hoy llega la gran solución.
