Para explicar su dogma en la portería, Pepe Mel tiró de hemeroteca, de ejemplos. Se fue a octubre de 2017 en Ipurua. El 15 de ese mes, con el Deportivo de La Coruña, en una crisis en la portería que hizo desfilar hasta cinco guardametas a lo largo de la campaña, hizo debutar a Francis Uzoho. El nigeriano tenía 18 años y 352 días. Esa cifra dejó un récord de precocidad: es el portero extranjero de menor edad en debutar en Primera División.

"Si Josep no estuviera preparado, no estaría en la convocatoria. No llevo a la gente por llevarla. Si miras el currículum cercano mío, no hay que ir muy lejos, puse en Eibar en Primera División a un chaval con ocho años. Seis meses después, su seleccionador lo puso de titular en un Mundial. El que es bueno es bueno, no hay que mirar el carné", aseguró el técnico madrileño.

Una muestra de las intenciones que Pepe Mel tiene para la portería de la UD Las Palmas. La decisión está tomada desde hace tiempo, aunque no dejó del todo claro que Josep Martínez ocupará la portería. "Tenía claro desde el partido de Albacete quién iba a jugar. Mañana [por hoy para el lector] lo vais a ver porque los jugadores aún no saben quién va a jugar", sentenció el técnico amarillo.

Una lista de jugadores donde está por primera vez Cristian Cedrés, uno de los futbolistas del filial predilectos para Pepe Mel, habitual en la dinámica del primer equipo. Y en él, una característica clave: su velocidad. "Necesitamos velocidad. En la Segunda División, tener velocidad, uno contra uno, encarar, desmarques, es fundamental. Hemos sufrido en carne propia ese tipo de jugadores. Él en Las Palmas Atlético ha jugado más en la izquierda, pero conmigo lo ha hecho también en la derecha. Nos puede ayudar", resumió.

Otros de los nombres propios de la rueda de prensa fueron los de Sergio Araujo, Danny Blum y Maikel Mesa. Los dos primeros vuelven tras sus respectivas lesiones; el segundo, después de comer grada durante las últimas tres jornadas. "Con una semana de entrenamientos es difícil que puedan jugar los 90 minutos. La decisión es ver si de principio pueden jugar o no. Lo valoraremos con ellos mismos y tomaremos decisiones", confirmó sobre Araujo y Blum. Por su parte, respecto al centrocampista tinerfeño, Mel le tiró un capote. "Estas semanas ha dado un paso adelante en los entrenamientos. Es un chico fantástico en lo profesional y en lo personal. Sí puedo decir que iba a venir en la convocatoria sí o sí, por encima de que Toni Robaina estuviera enfermo", aseguró.

Sobre qué espera del CD Lugo, con Eloy Jiménez en el banquillo de estreno en el Gran Canaria, Pepe Mel fue franco: "es una incógnita". "Desde que estoy aquí es la primera vez que los jugadores no han visto vídeo del rival. Es absurdo perder el tiempo. Nos hemos informado de lo que ha hecho Eloy en otros equipos, tenemos informes. El mundo del fútbol es una peluquería de señoras: todo enseguida corre, todo se sabe y se habla", sentenció el madrileño. Eso sí, por lo visto con anterioridad, augura "un rival bueno" en la Isla. "Puede parecer que está haciendo una temporada mala, que el fútbol no les fluye, pero no pienso eso de ellos. Tienen gente que hacen daño", argumentó.

Todo con un llamamiento a la afición, a la que le solicitó unidad. "Les pido que nos alienten y estén con nosotros, un soplo de aire a nuestro favor", añadió el técnico, que aparcó tiempos futuros. "El futuro pasa por ganar mañana porque todo lo que no sea eso hará que le sigamos dando vuelta a la situación", agregó.