No hay manera. El derbi canario entre el CD Tenerife y la UD Las Palmas acabó sin goles (0-0) en un partido en que el cuadro amarillo gozó de las ocasiones más claras, sobre todo en la segunda parte, sin embargo, su falta de pegada volvió a jugarle una mala pasada. No fue superior en el juego salvo cuando jugó con un futbolista más desde el minuto 73 por la expulsión justa de Luis Milla, que hasta entonces había protagonizado lo mejor del choque. Cedrés, frente al portero en la primera jugada de peligro del partido; Curbelo, con un remate de cabeza en la primera parte; y Drolé, con otro testarazo en el tramo final, perdonaron al cuadro chicharrero, que desde el inicio hasta el descanso fueron superiores en la creación pero no crearon peligro.

El VAR, al borde del minuto 90, dejó sin efecto un penalti claro que el colegiado había pitado sobre Rubén Castro porque había habido fuera de juego en la acción previa. Pudo haber significado el triunfo de la UD en el Heliodoro 18 años después, pero la justicia que el curso pasado brilló por su ausencia en los dos derbis, esta vez apareció para perjudicar al que había sido perjudicado.

No sorprendió Pepe Mel, que en la previa del partido dio las pistas suficientes como para adivinar el equipo titular que iba a sacar en el Heliodoro. Apostó por mover varias piezas. Curbelo pasó al centro de la defensa por la baja de Aythami -sancionado-, Álvaro Lemos bajó al lateral derecho, Mauricio Lemos redebutó en el mediocentro y Pedri y Cedrés se cambiaron las bandas: el tinerfeño emigró hacia la derecha y el grancanario hacia la izquierda.

Fue Cedrés, precisamente, el que tuvo ante sí la oportunidad de dar una bofetada a mano abierta al Rodríguez López a las primeras de cambio (3'). Tras una pérdida del Tenerife en el centro del campo, el balón llegó a Kirian, que con el campo abierto lo mandó en profundidad a la carrera del extremo. Ya dentro del área y tras ganar en el cuerpo a cuerpo a Luis Pérez, recortó para perfilarse. Superado el defensor, lo tenía todo para marcar, sin embargo, su disparo con el interior se fue fuera por centímetros.

Al inico trepidante del encuentro y a la carta de presentación de Las Palmas le correspondió el cuadro local sólo un minuto después. Bermejo puso la pelota a la espalda de la zaga amarilla y Malbasic lo recogió algo escorado a la izquierda. Su centro posterior pasó por encima de De la Bella y Suso, que esperaba con ansia la caída de la bola enganchó una volea sin dejarla caer, pero la mandó al lateral de la red. Medio estadio cantó gol.

El derbi prometía. En sólo cinco minutos había dejado ya dos ocasiones claras de gol. Superado el inicio vertiginoso, el choque evidenció lo que se esperaba: dominio del Tenerife y repliegue de Las Palmas para robar y salir a la contra. En ese contexto, Aitor Sanz y Luis Milla emergieron en el centro del campo chicharrero para tomar las riendas. Tocaron la pelota una y otra vez y buscaron la espalda de la defensa con balones largos, casi siempre precisos, ante la pasividad de la UD, que esta vez no presionó y se dejó la intensidad que había demostrado en partidos anteriores en el vestuario.

Pese a que el clásico canario tendía a teñirse de blanquiazul, faltaron oportunidades para marcar. La siguiente clara tuvo lugar en el minuto 20, cuando un nuevo balón de Milla por encima de la defensa al desmarque de Malbasic lo recogió el serbio para marcharse de Curbelo como quiso y disparar a puerta, aunque muy escorado hacia la izquierda. Josep, que tapó bien, cerró las piernas y privó al delantero de la única posibilidad que tenía para hacer el tanto.

La UD, perdida hasta entonces, sólo resolló cuando en la siguiente jugada (22') Curbelo remató de cabeza con un poderío enorme una pelota que venía desde la derecha tras una falta muy lejana sacada por Ávaro Lemos. Ortolá, que se encontró el esférico de frente, tuvo que necesitar dos intervenciones para acabar con el peligro. Las Palmas había tenido dos oportunidades muy claras para haber obtenido el 0-1 sin haber creado juego alguno.

Descansó el equipo de Mel con un rato de posesión, pero fue un espejismo. El Tenerife volvió a hacerse dueño del partido por medio de sus dos mediocentros. Milla, superior a todos, colgó dos faltas que asustaron a Josep. En la primera, Carlos Ruiz, el héroes del derbi anterior, cabeceó bombeado. En la segunda, el propio lanzador buscó la escuadra. En ambas, el valenciano desbarató el peligro. Un cabezazo de Malbasic fuera a la salida de un córner y un error del árbitro, que pitó una falta en el centro del campo a favor de la UD cuando Pedri se disponía a entrar en el área, dieron pasó al descanso.

Mel, en su tiempo de reflexión durante el receso, realizó una modificación táctica. No hizo cambios, pero recolocó a los jugadores. Con el mismo 4-1-4-1, Mauricio, bajó a la defensa, Curbelo pasó al lateral, Álvaro al extremo y Pedri, que en la derecha había sido mucho menos Pedri, al centro, por delante de Kirian y Ruiz de Galarreta. El movimiento del técnico respondía a una cuestión lógica: había que cambiar algo ante la superioridad del rival.

La apuesta pareció darle resultado con una llegada del gallego hasta la línea de fondo y un centro al área que no encontró rematador como primera jugada de la segunda parte, sin embargo, el Tenerife aplacó las nuevas intenciones amarillas a base de intensidad. Una pérdida de balón horrorosa de Kirian en su propio campo (54') propició una ocasión clara que no acabó en un mal mayor porque De la Bella estuvo atento en el cruce. Luego (60'), Malbasic, en otro de sus múltiples desmarques, centró desde la derecha y Bermejo cabeceó a pocos metro de la portería. No fue gol porque su remate fue directo a las manos de Josep.

El tremendo susto, sin embargo, despertó a la UD. Pareció necesitarlo para volver a tomar el pulso. De repente, el equipo empezó a correr y bajó los humos al 'Tete'. Kirian lo intentó desde fuera del área con la zurda, pero su tiro se fue alto (65'). Poco antes, Pedri, que emergió por el centro, se había marcha de un rival dentro del área y había puesto el balón al centro en busca de Rubén, que no llegó por poco, y De la Bella también había puesto otra pelota desde la izquierda con peligro. Las Palmas estaba más cerca del gol.

Y lo estuvo más con la expulsión de Luis Milla por roja directa después de una durísima entrada sobre Pedri. Ni protestó. Con uno menos, el Tenerife renunció al partido y se aferró al empate. Las Palmas, superior desde hacía tiempo, también con 11 contra 11, se fue a por el gol. Drolé, que acababa de entrar por Cedrés, remató de cabeza escorado tras un centro de Álvaro Lemos y Ortolá paró el balón de milagro (81'), Acto seguido, otro centro del gallego desde la derecha lo remató algo forzado Srnic, que llevaba un minuto en el campo después de sustituir al lesionado Mauricio. E inmediatamente después, Kirian lo intentó nuevamente desde lejos, pero sin precisión.

El derbi se había convertido en una resistencia del Tenerife ante el asedio de la UD, cuyo técnico, Pepe Mel, dio entrada a Pekhart por Pedri en busca del gol de la victoria. La emoción del tramo final llegó a su culmen cuando Díaz de Mera pitó penalti a favor de Las Palmas al borde del 90. No se había equivocado. Rubén Castro, hasta entonces casi inédito, había sido derribado de manera clara, sin embargo, el VAR, cuya ausencia el curso pasado tanto perjudicó al cuadro amarillo en varios partidos y especialmente en los dos derbis, hizo justicia: hubo un fuera de juego anterior. Los 18.000 que acudieron al Heliodoro, que habían entrado en estado de pánico, respiraron con la decisión.

Incluso, tuvieron muy cerca la posibilidad de celebrar un gol y llevarse el partido, pero habría sido demasiado premio. El lateral izquierdo, Isma López, que acababa de sacar un córner desde la derecha, disparó con la zurda en busca de la escuadra en la jugada siguiente. Casi consigue el milagro. Al final, el empate imperó en el marcador y la UD volvió a marcharse de Tenerife sin sumar los tres puntos. La maldición, que se extiende un año más, continúa.

Ficha técnica:CD Tenerife (0): Ortolá; Luis Pérez, Alberto, Carlos Ruiz, Isma López; Aitor Sanz, Luis Milla Borja Lasso (Undabarrena, 74'); Suso, Bermejo (Álex Muñoz, 93') y Malbasic (Miérez, 72').UD Las Palmas (0): Josep; Álvaro Lemos, Curbelo, Mantovani, De la Bella; Mauricio Lemos (Srnic, 79'); Pedri (Pekhart, 87'), Ruiz de Galarreta, Kirian, Cedrés (Drolé, 74'); y Rubén CastroÁrbitro: Díaz de Mera (C. Castellano-manchego). Expulsó al local Luis Milla por roja directa (73'). Amonestó al local Borja Lasso y a los visitantes Mauricio Lemos, Mantovani, Pedri, De la Bella y Ruiz de Galarreta.

Incidencias: partido correspondiente a la cuarta jornada de LaLiga SmartBank, disputado en el estadio Heliodoro Rodríguez López de Santa Cruz de Tenerife ante unos 18.000 espectadores.