La llegada de Tomás Cardona a las dependencias de la Unión Deportiva cada día está más cerca. El último avance que se ha hecho en la contratación del central argentino lo ha dado el Godoy Cruz, que a falta de la firma del jugador, habría cerrado su renovación hasta junio de 2022 con el fin de enviarlo cedido al equipo amarillo a cambio de 150.000 euros y guardarse una cláusula de obligación de compra por una cantidad de 2 millones de euros en caso de que Las Palmas ascienda a la Liga Santander.
La operación se ha hecho de rogar, pues para que primero llegue Cardona a las filas de Pepe Mel, tiene que hacerse oficial la salida de Mauricio Lemos al Fenerbahce turco. Primero dejar salir para después permitir entrar. La filosofía de austerirdad económica en las arcas del club es una máxima a cumplir esta campaña.
Precisamente el club otomano se había interesado sobre la contratación del central argentino para interceder en la incorporación de Lemos, tal y como apuntaban diversos medios turcos.
Finalmente, en el tira y afloja entre las tres partes implicadas, parece ser que es Las Palmas el equipo que más beneficio sacará de la operación, pues se liberará de una de las fichas más altas de la plantilla como la de Mauricio, además de percibir un millón y medio por su traspaso al Fenerbahce; se hace con los servicios de Cardona teniendo que pagar 150.000 euros más su ficha anual, y en caso de que la UD regrese a la máxima categoría y disponga de mayor músculo financiero, abonaría 2 millones de euros por su fichaje, una cantidad que podría asumir por entonces.
En ese supuesto caso, de que Las Palmas haya ascendido a LaLiga Santander, no tendría que abonar la cifra directamente a Godoy Cruz, sino que el club de Mendoza percibiría un 60% del traspaso -1,2 millones- y el San Lorenzo de Almagro adquiriría el 40% restanto de la transacción, que se tasaría en 800.000 euros.
El club del Papa Francisco apercibiría este montante por el hecho de que se reservó una cláusula en el traspaso que hizo por Cardona -formado en la cantera azulgrana- por 400.000 dólares en la que se especificaba que en una futura venta del central debía apercibir ese 40% por el jugador.
Así, con este movimiento del Godoy Cruz, con quien el defensa argentino concluía contrato en junio de 2021, se asegura que en caso de que la Unión Deportiva no ascienda a LaLiga Santander, el jugador regrese a su poder sin poner en compromiso su unión y tendría un año más de contrato sin que pudiera desvincularse gratis del club de Mendoza.
Además, se esfuma de un plumazo las opciones que barajaba el defensa sudamericano de firmar con Newell's Old Boys de la liga argentina, como con el Fenerbahce.
De esta forma la plantilla de Mel cuenta con un central más en sus filas. Un cambio de cromos que se venía anunciando desde hace más de una semana y que por tanto el entrenador madrileño se queda con Aythami Artiles, Álex Suárez y Martín Mantovani -con el cartel de salida- como centrales puros, además del polivalente Eric Curbelo, entre los jugadores con ficha profesional entre su armada.
El extremo, ¿argentino?
En las últimas horas ha saltado el nombre de Ezequiel Cerutti en varios medios de comunicación deportivos de Argentina como una de las posibilidades que maneja Las Palmas para reforzar la posición de extremo que ya anunció el club que quería fortificar.
El Pocho, como es conocido, llevaba desde octubre de 2019 apartado por el San Lorenzo de Almagro e inmerso en un conclicto salarial con el club ya que hasta el mes pasado le debían todas las mensualidades de 2020, aunque ya llegó a un acuerdo económico para saldar la deuda.
Tal y como refleja la página web especializada en el club azulgrana, sanlorenzondeamerica.ar Cerutti llegaría en calidad de cedido a Las Palmas, pues el atacante tiene contrato con el Ciclón hasta junio de 2022.
El interés del conjunto insular en el extremo argentino podría interferir en la operación de Juanjo Narváez para que continúe una temporada más a las órdenes de Mel
