El entrenador del Sporting de Gijón, David Gallego, aseguró ayer que no busca excusas, pero incidió en el hecho de que su equipo jugará ante la UD Las Palmas 72 horas después de haberlo hecho en Girona, mientras que su rival ha tenido dos días más de recuperación, pese a lo cual, comentó, «el equipo llega al cien por cien en lo emocional».
«El equipo está como debe de estar 48 horas después de jugar un partido», aunque «los que más minutos tuvieron no están del todo recuperados», precisó el técnico rojiblanco, que confesó que le hubiera gustado «tener una semana más larga para recuperar bien» y afrontar el choque de hoy con más garantías.
El entrenador, que aseguró no plantearse rotaciones o cambios de sistema, consideró que «no quedan tres finales» sino que el de mañana es «un partido muy importante» y luego ya se verá «si son finales o no lo», porque «lo que hay que hacer es centrar toda la energía en el encuentro ante Las Palmas».
Para Gallego, los puestos de playoff «están abiertos porque hay varios equipos muy juntos y quedan pocos puntos», pero «el equipo está centrado en Las Palmas y ya habrá tiempo de pensar en Fuenlabrada y Almería», los dos siguientes rivales del Sporting.
Afición
«A la afición no se le puede pedir nada porque se percibe que están al cien por cien con el equipo», manifestó David Gallego, que pidió que si ante el Almería, último partido en casa de la liga regular, «puede haber público, si son 5.000 que parezca que hay 30.000».
Cabe recordar, en ese sentido, que David Gallego no conoce el ambiente de El Molinón porque llegó al conjunto asturiano el pasado verano, y por ello asegura sentir «pena de no haber podido disfrutar esta temporada de la afición».
La última vez que hubo gente en las gradas de El Molinón fue, precisamente, en el partido que enfrentó al Sporting y a la UD Las Palmas el pasado 8 de marzo de 2020, cuando el cuadro rojiblanco se impuso al amarillo por 4-0 en una tarde aciaga de los de Pepe Mel, que dominaron en la primera parte pero sucumbieron en la segunda. El regreso de la gente al estadio habrá de esperar.
