Rafael Batista Hernández Felo (Las Palmas de Gran Canaria, 85 años) acaba de ser intervenido de una vesícula. El exjugador del Real Madrid y UD Las Palmas no había encendido el ordenador y se enteró esta mañana por una llamada de LA PROVINCIA / DLP del fallecimiento de Paco Gento. "¿Se ha muerto Paco? No me digas, el mejor extremo zurdo de todos los tiempos. Preciso, letal, infalible; menudo dribling. Es una pena tremenda. Conformó una sociedad única con Rial, su palmarés lo dice todo. Pero aún más, su corazón. Era sencillo, callado...No te cogía el teléfono, era bastante introvertido. Fue presidente de la Asociación de Exjugadores del Real Madrid y le digo que con esa potencia, no había nadie como Gento. Para frenarlo tenías que ponerte a treinta metros, o comprarte un helicóptero".

Felo, 65 duelos de amarillo y 46 en el club merengue, se enfrentó en tres ocasiones a Gento y en el Bernabéu. "Ganar allí era imposible, toda una pesadilla para Las Palmas. De hecho, la UD sigue sin ganar en el Bernabéu. Recuerdo que perdí las tres ocasiones [1958, 1959 y 1966] contra Gento en La Castellana y por supuesto nos marcó. Hasta en cuatro ocasiones, eso no se olvida". En relación a la calidad técnica del seis veces ganador de la Copa de Europa, realza su habilidad para conducir el balón, así como la potencia y la precisión en el golpeo. "La arranca, el quiebro seco....Tenías que anticiparte si querías frenarlo. Tremendamente efectivo, jamás el fútbol dio un jugador con esa capacidad de decidir un partido. El más resolutivo de la historia del fútbol español y solo por debajo de los grandes de esta época como Cristiano Ronaldo o Leo Messi".

De perfil bajo

Un artista de perfil bajo. Sobre Francisco Gento (fallecido a los 88 años), Felo insiste que jamás se le subió la fama a la cabeza. Con 600 partidos en el Real Madrid, fue internacional en 44 ocasiones y se midió a la UD Las Palmas en 18 ocasiones. El único jugador de la historia con seis Champions en su palmarés "siempre te miraba a los ojos, calladito y honrado". "Al inicio, te parece un poco seco. Pero no era presumido. Afectivo, un rostro de valores. Trabajador y que elevó al Madrid hacia una categoría mágica. Es parte de la grandeza de ese equipo, y su pérdida me resulta terrible".