Descubre las mejores formas de recalentar tus comidas sin el microondas

El microondas, una invención que cambió para siempre la cocina doméstica, aunque a menudo se asocia con recalentar sobras de comida, no es la opción más recomendable para revivir tus platos.

En líneas generales, es positivo utilizar el microondas para ciertas recetas, pero también hay alternativas mucho mejores para calentar tus sobras o platos que han quedado fríos. A pesar de la rapidez del microondas, los resultados pueden ser menos que satisfactorios. Las texturas gomosas o blandas, la pérdida de caramelización, el exceso de humedad o la sequedad, las salpicaduras, y el calor irregular son algunos de los problemas que puedes encontrar al utilizar este electrodoméstico.

Estas son algunas recomendaciones para recalentar tus comidas de manera óptima:

Recalentar filetes y carne

Si necesitas recalentar filetes, chuletas, bistecs u otros cortes de carne, el horno y la plancha son tus mejores aliados. Utiliza el horno a una temperatura media, no superior a 120°C, sobre una rejilla, durante 20-30 minutos, o hasta que alcance la temperatura deseada en el interior. Luego, seca la carne con papel de cocina y dora brevemente ambos lados en una sartén de hierro a alta temperatura. Este proceso resaltará el crujido exterior y mantendrá la carne tierna por dentro.

Para filetes más finos, como los mencionados, corta en tiras y saltea en una sartén o plancha sin adherencia durante poco tiempo.

Recalentar pescado

El pescado es una proteína delicada que requiere cuidado al recalentar. Utiliza el horno a 135-140°C para pescados más gruesos y ligeramente grasos. Coloca la pieza en una placa o rejilla, cúbrelo con papel de aluminio para mantener la humedad y recálentalo durante 10 minutos.

Recalentar pizza

Nunca uses el microondas para recalentar pizza, ya que puede afectar la textura de la masa. El horno es una opción, pero consume más energía. El grill puede ser útil, pero debes supervisar el proceso para evitar que se queme en segundos.

La mejor manera de recalentar pizza es con una sartén o plancha de hierro fundido. Precalienta a fuego medio, coloca la pizza, tápala y espera 3-5 minutos. Luego, añade unas gotas de agua fría al fondo para generar vapor. En pocos minutos, estará lista para disfrutar.

Recalentar arroces y paellas

Para recalentar arroces secos y paellas, utiliza el horno a temperatura media-baja y cúbrelos con papel de aluminio. Otra opción es hacerlo en la sartén a fuego bajo, permitiendo que el fondo se caramelice para obtener un toque crujiente.

Si tienes arroces húmedos, melosos o caldosos, utiliza una olla o cazuela a fuego lento, añadiendo un poco de caldo extra para recuperar la humedad.

Recalentar pasta

La pasta cocida también debe refrigerarse rápidamente y consumirse en 24 horas. Puedes recalentarla agregando un poco del agua de cocción y ajustando el proceso según el tipo de receta. Para pasta tierna con salsa ligera, pásala por la sartén a fuego medio-bajo con parte del agua de cocción.

Pasta con salsas cremosas se recalentará en una sartén con aceite o mantequilla a fuego bajo. Agrega nata o queso si está seca. En el caso de pasta con salsa de tomate, realiza una "pasta ripassata" en la sartén con aceite.

Recalentar guisos y estofados

Para recalentar guisos, potajes o estofados, coloca las sobras en una olla o cazuela, calienta con la tapa y revuelve suavemente hasta que alcancen la temperatura deseada. Evita que hierva o cocine demasiado, ya que esto podría alterar la textura de algunos alimentos.

Recalentar comida frita con freidora de aire

Los precocinados fritos pueden recalentarse fácilmente en una freidora de aire a 200°C. Asegúrate de que las piezas de pollo más gruesas se recalenten a una potencia más baja y durante un tiempo un poco más largo para evitar que se quemen por fuera.

Revivir el pan duro

Si el pan está duro, puedes recuperarlo humedeciéndolo pulverizándolo con un espray, envolviéndolo en un paño mojado o mojándolo bajo el grifo. Luego, caliéntalo en el horno sobre una rejilla a 175-180°C durante 5-10 minutos para obtener una textura crujiente.

Evitar el microondas para el café

Nunca recalientes el café en el microondas, ya que puede dañar su sabor y textura. Si es necesario, calienta la leche o un poco de agua por separado y agrégala al café frío. Esto ayudará a mantener su calidad.

Con estas recomendaciones, podrás disfrutar de comidas recalentadas con mejor sabor y textura, en lugar de depender en exceso del microondas. Aprovecha estas técnicas para dar nueva vida a tus sobras y platos fríos.