Si ya de por sí cuesta horrores ponerse uno manos a la obra con la limpieza del hogar, hay tareas de casa que son más costosas y pesadas que otras.
Los baños, la cocina y el suelo de nuestras casas son algunas de las actividades de limpieza que más dolores de cabeza traen a la hora de dejar nuestras viviendas perfectas.
Si eso tiene que ver con el interior de nuestras casas, imagina cómo de pesado debe hacerse el limpiar el exterior de nuestros hogares: la terraza, los jardines, las sillas de exterior o, por ejemplo, las persianas.
Las persianas son, sin duda, una de las cosas más complicadas de limpiar de las casas y una de las que más esfuerzo requieren.
Pero, ¿y si existe un truco para dejarlas perfectas sin tener que hacer un esfuerzo desmesurado?
Para esta pregunta, tenemos una respuesta: ese truco existe y te va a resolver muchos de tus problemas.
Trucos para facilitar la limpieza de persianas
Antes de ofrecerte diferentes trucos, debes tener en cuenta de qué material está hecha la persiana: madera, PVC, plástico, aluminio... La naturaleza de cada persiana reclama un tipo de producto diferente.
¿Cuál es la mejor forma de dejar nuestras persianas blancas e impolutas? Para conseguir este objetivo necesitarás estos tres elementos: Con un poco de jabón neutro y agua limpia podremos sacar brillo a nuestras persianas independientemente de su material. También se convertirá en una gran aliada la vaporeta.
Un exterior perfecto
Para tener las ventanas impolutas, debes seguir estos pasos:
- Bajamos la persiana de forma parcial para que las lamas queden abiertas.
- Tendrás que usar un cepillo de cerdas blandas y limpiaremos bien de arriba abajo para deshacernos de la suciedad.
- Tras cepillar la persiana, debemos aspirarla tanto por dentro como por fuera.
- Cuando se haya eliminado el polvo, pasamos una bayeta con agua y jabón neutro, de izquierda a derecha y de arriba abajo.
- El secado deberás realizarlo con un trapo de algodón.