Las autoridades japonesas han detectado niveles de radiación en la planta de purificación de agua de Kanamachi, en Tokio. Agua en estos momentos contaminada por el yodo radiactivo. Los niveles de contaminación en esta planta duplican el nivel seguro para los niños. Son las consecuencias de la radiación procedente de la central nuclear de Fukushima. El agua de Tokio se contamina. El gobernador del país nipón asegura que el nivel de radiación no supone un riesgo inmediato para la salud y que el agua aún puede ser usada. Sin embargo, advierte que los niños menores de un año se abstengan de usar agua del grifo.