Más de seis millones de votos. Casi el 18 por ciento del electorado. El mayor porcentaje logrado nunca por un candidato de la derecha radical en unas presidenciales. A Marine Le Pen no le ha bastado para acceder a la segunda vuelta, como sí logró su padre Jean-Marie. Pero sí para que los dos candidatos se apresuren a atraerse a sus votantes. Con más fuerza, Nicolas Sarkozy. Pero Marine Le Pen no dice no confiar en el actual presidente de la República.