Este domingo se ha cumplido un año del Real Decreto que dejó sin tarjeta sanitaria a 800.000 inmigrantes que viven en España en situación irregular. Cada uno tiene su historia. La enfermedad es diferente, pero la realidad la comparten. El decreto garantiza la atención sanitaria en urgencias a los inmigrantes en situación irregular en España pero no les cubre tratamientos continuados.