El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria renunció ayer a continuar financiando el festival Womad en calidad de principal patrocinador y deja en manos de la productora DD & Company que el evento continúe celebrándose en la capital. En palabras de la concejal de Cultura, María Isabel García Bolta, "el Ayuntamiento no puede sufragar el cien por cien de los gastos del Womad", un proyecto que calificó de "actualmente insostenible" para las arcas municipales al tener que sufragar en su totalidad un "evento gratuito para el público y cuya producción artística y de dirección son privadas".

La postura municipal no tiene vuelta atrás a menos que desde Womad se consiga implicar a otros patrocinadores públicos y privados, en cuyo caso "estaríamos dispuestos a dialogar con lo que sea", según García Bolta. La concejal advirtió ayer a la organización que "quizás haya llegado el momento de que se replantee este modelo" de festival, dijo en referencia a que las ediciones de la capital grancanaria y Cáceres son las únicas de cuantas se celebran en distintas partes del mundo en que no se cobra entrada al público. "Este modelo no puede mantenerse y sería razonable que el Ayuntamiento pudiera recuperar al menos una parte de su inversión", subrayó la responsable de Cultura.

"No compensa"

Es más, ni siquiera la fórmula temporal que se determinó el pasado año para salvar la edición de 2011, que redujo el Womad a un solo día, es posible recuperarla para el próximo noviembre, tal como dejó entrever García Bolta. "En 2011 el Ayuntamiento accedió a un festival ajustado de presupuesto, en torno a los 273.000 euros, y que la organización Womad redujo a un solo día, con un resultado que nos lleva a pensar que el desembolso económico no compensa a la ciudad".

El desmarque municipal hacia el festival impulsado por el músico Peter Gabriel y que se viene celebrando en la Isla desde 1993 no significa, en opinión de María Isabel García Bolta, que la ciudad no necesite de Womad. Si bien dijo: "Nos gustaría que Womad continuara confiando en el público de la capital que sí está interesado por el Womad, y que luche para que otras empresas e instituciones se impliquen igualmente en la celebración de este festival", también manifestó que "no a todo el mundo le interesa el Womad y si la ciudad se queda sin festival es un problema de Womad, no del Ayuntamiento".

Lejos de argumentar la crisis para tomar esta decisión, García Bolta insistió en que "el recorte de Cultura nos obliga a otro modelo y a establecer prioridades", y que por tanto "los conciertos gratuitos no proceden". García Bolta se desmarcó de cualquier responsabilidad derivada de este asunto, al tratarse de una empresa privada que trabaja con dinero público. "Estamos en fecha", dijo, cediendo el testigo a la organización, que ahora tiene la última palabra.