Si no existiese This is Spinal Tap, Some Kind of Monster bien podría hacer su papel. Aunque la película resulta tan exagerada que parece una comedia, lo cierto es que se filmó sin la más mínima ironía y con respeto hacia sus protagonistas. El proyecto empezó como un vídeo promocional sobre la grabación del que iba a ser el próximo álbum del grupo, St. Anger, pero la crisis que estalló entre los componentes del grupo lo convirtió en otra cosa, participando un terapeuta y sacando a la luz los problemas personales, los egos frágiles, las adicciones, las deserciones, la paternidad, el caos doméstico, la casi total auto-destrucción ?

Las cámaras recogen sin ambages esa catarsis colectiva de los componentes de Metallica, que no es que estén haciendo el ridículo sino que simplemente tratan de enfrentarse a la edad adulta tras una vida comportándose como adolescentes.

Metallica: Some Kind of Monster, dirigida por Joe Berlinger y Bruce Sinofsky, se proyecta en el Monopol Music Festival mañana viernes, en último pase, a las 17.30 horas en la sala 4 de los Multicines Monopol.