Los vecinos que aprovechando el día de fiesta de ayer se acercaron hasta la playa de las Alcaravaneras para darse un baño y refrescarse del aire bochornoso se vieron una vez más sorprendidos por la prohibición de baño impuesta por el Ayuntamiento capitalino por riesgo de contaminación.

La Concejalía de Playas del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria decretó el pasado jueves la prohibición del baño en las Alcaravaneras por riesgo de contaminación, una prohibición que se extenderá al menos hasta el lunes, según confirmó ayer el concejal del área, Héctor Núñez.

Playas atribuye a los efectos del temporal, y especialmente al tiempo del sur, que "impide la normal circulación del agua" la presencia en el agua de restos de las bacterias Escherichia coli y enterococos intestinales.

Según el Ayuntamiento, los resultados de los últimos análisis periódicos que realiza el servicio municipal de Playas, revelan "un nivel de contaminación anormal, presumiblemente atribuible a los sucesivos días de tiempo sur que impiden la normal circulación del agua en esta bahía y la renovación de la misma", indica una nota.

El cierre se produjo tras comprobar las muestras de agua tomadas el día 21 de diciembre. Núñez adelantó que la próxima muestra se tomará hoy mismo.