Los policías locales de Las Palmas de Gran Canaria aprobaron anoche masivamente rebelarse contra el gobierno municipal por su anuncio, aún sin concretar, de someter a recortes los pluses que cobran los agentes. Con la presencia de 250 funcionarios del cuerpo, y tras un tenso y largo debate, con su eterno turno de preguntas, respaldaron las propuestas del comité formado por los seis sindicatos del área municipal de Seguridad de realizar actos de protesta en la calle y de boicotear las jornadas previas a las elecciones generales del 20 de noviembre.

Fue la principal medida de presión aprobada anoche por los agentes asistentes a la asamblea. Se trata de convocar una manifestación-concentración para el día 28. Esta protesta pretende reunir a decenas de agentes en la plaza de Santa Ana mientras se celebra el pleno ordinario de fin de mes en las Casas Consistoriales y hacer ostensible su disconformidad al alcalde, Juan José Cardona, y al concejal de Seguridad, Ángel Sabroso. La otra forma de protesta será un boicot en toda regla de cara a las elecciones: se negarán a repartir las citaciones a los miembros de las mesas electorales en los días previos a los comicios.

En cambio, se rechazó la posibilidad de trabajar a reglamento, esto es, aplicar estrictamente la normativa, de forma que se sancione cualquier infracción, sin excepciones. La idea fue rechazada después de mucho debate por su fuerte grado de afección sobre los ciudadanos. En este sentido, los asistentes dejaron claro que su protesta es contra el gobierno municipal del PP y el alcalde.

Esos fueron los acuerdos, pero hubo propuestas de todo tipo, como boicotear la jornada electoral del 20-N, en la que la Policía Local tiene un papel clave en la confección de los colegios y mesas electorales, aparte de velar por la seguridad de ese día; hasta exigir al gobierno municipal que retire el plus productividad a todo el personal del Ayuntamiento si les recorta a ellos. Una de las ideas más repetidas fue la de recortar por los empleados temporales pendientes de consolidación, unos 700, antes que quitar complementos a la policía, o bien que se redujera "el sueldo de la [gerente de Limpieza, Cristina Reyes] cuñada de Cardona.

El asunto de los sueldos ocupó buena parte del turno de preguntas. Hubo varios agentes que denunciaron que, por lo general, su salario es de 1.500 euros mensuales, frente a "los 3.000" que cobra un concejal. En este punto, José Gerardo Rodríguez, portavoz de CCOO, señaló que él percibe "11 euros a la hora, menos de lo que cobra la chica que limpia en mi casa". Junto a él y, en la mesa sindical, estaban también Víctor García (USP), Francisco Cruz (SPPL), Marcos Naranjo (UGT), Cristóbal Santiago (CSIF) y Bernardo Salom (IC). Además de los asistentes, que casi completaban la mitad de la plantilla total, asistió la concejal de Compromiso Nardy Barrios.

Las medidas aprobadas anoche se unen a las que ya están vigentes desde la asamblea del pasado 29 de septiembre cuando se acordó no prestarse voluntarios para realizar servicios y horas extra, o iniciar una huelga de multas. En este sentido, los sindicatos convocantes cifraron en un descenso cercano al 80% en el número de multas impuestas en las últimas tres semanas. Sin embargo, fuentes de la Jefatura de la Policía Local, que sí reconocieron un descenso, aseguraron que esta disminución es mucho menor.

El temor de los agentes a la pérdida de derechos estriba sobre todo en el anuncio del gobierno local de una revisión del plus de vacaciones, por el que los guardias venden 15 de sus 45 días libres a la corporación.