Los titulares de licencias de taxis de la capital grancanaria sólo podrán contratar asalariados a jornada completa. En caso de que no adapten los actuales contratos a la nueva normativa, serán sancionados y sólo se admitirán nuevas contrataciones de chóferes por un periodo de ocho horas. Esta es una de las novedades de la nueva Ordenanza del Taxi, que ayer fue aprobada de manera definitiva por la comisión de pleno de Organización y que está previsto que entre en vigor la próxima semana. Otra novedad de la ordenanza gira en torno a la exigencia de conocimientos básicos de inglés a los nuevos conductores. Los taxistas podrán ser ahora titulares de un máximo de cinco licencias.

La ordenanza fue rechazada por todos los grupos de la oposición, el Partido Socialista, Compromiso por Gran Canaria y Nueva Canarias, que lamentaron que el alcalde, Juan José Cardona, haya perdido la oportunidad para regular a fondo el sector del taxi en el nuevo reglamento y acabar con el fraude de los floteros, que hasta el momento ha provocado la apertura de dos investigaciones judiciales, en las que están imputados ocho taxistas, tras las denuncias presentadas por la Asociación de Asalariados y la Asociación de Titulares de Licencias de Autotaxis de Canarias (Atlatc).

El concejal de Movilidad, Ángel Sabroso, aseguró ayer que el Ayuntamiento "sólo va a permitir contratos a jornada completa", una novedad que tiene como objetivo "dignificar y mejorar las condiciones laborales de los profesionales del volante. Queremos evitar", dijo, "que se siga cometiendo picaresca y fraude con los contratos de dos horas. El contrato de ocho horas será de aplicación inmediata, en cuanto se publique la ordenanza en el Boletín".

También establece la ordenanza un plazo máximo de tres meses para implantar el uniforme. El concejal anunció que la próxima semana presentará la propuesta del Ayuntamiento, que no desveló, a las cinco asociaciones y cooperativas de autónomos y asalariados para intentar llegar a un acuerdo. "Les daremos un plazo de quince días para que realicen sus aportaciones. Trataremos de alcanzar el mayor consenso posible, pero donde sí que no hay vuelta atrás es que va a haber una uniformidad de obligado cumplimiento", dijo.

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