Un grafiti del artista británico Banksy apareció ayer en una pared situada frente a la embajada francesa en Londres, crítico con el uso de gas lacrimógeno en el campo de refugiados conocido como La jungla, cercano a la localidad de Calais (Francia).

El mural del misterioso grafitero muestra a la niña pequeña que aparece en el musical Los Miserables con lágrimas en sus ojos, mientras que, de fondo, se ve una lata del citado gas.

La obra, que ha despertado una gran expectación y numerosas visitas de curiosos que han acudido a tomar fotografías, incluye también un código de barras.

Se trata del último de una serie de trabajos pintados por el grafitero británico, cuya identidad permanece rodeada de incógnitas, que critica la manera en la que Europa gestiona la actual crisis de refugiados.

Parece que alguien podría haber intentado arrancar el mural de la pared donde se pintó, en el céntrico barrio londinense de Knightsbridge, porque las esquinas se ven rasgadas.