La madurez y plenitud de Romario. Jonathan Viera Ramos -27 años- encadena dos campañas en Primera División con la UD Las Palmas a un nivel sideral. Computa 17 goles y 16 asistencias. En la 2015-16, se convirtió en el máximo realizador del conjunto isleño con 10 dianas. Hay que remontarse a la campaña 1987-88, para encontrar a Narciso (11 tantos), que bate a Viera en el ranking de estiletes isleños en la máxima categoría y de amarillo. Y en la recién concluida 2016-17, estiró su dictadura de pólvora con siete dianas. La anotada, de penalti, en el Santiago Bernabéu, en el mágico (3-3) ante el gigante blanco, marcó el punto de inflexión definitivo.

En la pretemporada 2016, lo tenía todo en contra. Llegaba Prince y le robó todo el protagonismo. Portaba el '21' de Valerón, la huella de la leyenda. Con plena confianza por parte de Setién, fue aplacando las dudas. Volvió a marcar en Mestalla -en la jornada inaugural- y se perdió el pulso ante Vitolo en el Sánchez Pizjuán por una dolencia muscular. Dejó 33 partidos oficiales (2.676 minutos), siete goles y nueve asistencias -ocho en Liga y una en Copa del Rey-. En la retina de los aficionados, la obra de arte ante el Athletic en el Gran Canaria, o la rabia con la que celebró el último tanto liguero ante el Real Betis. Una carrera de superación y de enfrentamiento con el silencio de la derrota. "Odio perder; no soporto quedar segundo", insiste el guerrero del glamour.

Como muestra de agradecimiento, le regaló a Setién su última camisa firmada de la temporada. Tras el pulso ante el Dépor en Riazor -20 de mayo-, se la brindó al estratega de seda. De esta manera, silenciaba a los críticos, que habían pregonado una tensa relación entre Romario y su superior [el '21' fue sancionado tras una fuerte discusión con el cántabro en el vestuario del Camp Nou].

Y ahora, en la legión del Baby Boom

A su consagración, de amarillo y en la mejor liga del mundo [y tras ser preseleccionado con la Roja, junto al teldense Roque Mesa], ahora le llega otra responsabilidad. Será padre en noviembre, un viaje que emprende junto a su esposa Estefanía. Sin prisa, pero sin pausa. "No se puede correr más que el tiempo". Palabra de Viera, un arma letal. Y de destrucción masiva por el imperio de gofio.