Cuántas veces nos hemos quedado sin palabras

exprimiendo la mirada, para que ella simbolice lo que siente nuestro corazón.

La vida no es más que un juego,

en el que intentamos soldar momentos a nuestra alma

para así nunca desprendernos de ellos.

El campo de nuestro juego, la vida,

rivales el odio, avaricia, incomprensión, soledad...

Luchemos por la victoria,

encontremos la felicidad,

esos momentos que intentan desvanecerse intentando escaparse.

Examen constante,

bendiciendo instantes,

borrando lágrimas.

Volar, huir, buscando salida,

de un laberinto desconocido,

enigma eterno. No caigamos en ese vacío.

Sumar y amar es crecer, merece la pena,

en nuestras manos está el tesoro,

lo encerramos, escondido en el pasado,

o creemos en nuestra pasión,

degustar las alegrías de buenos momentos,

migas de nuestro caminar,

del día de hoy, que ya forma parte del ayer.

Gracias días, por esos pletóricos instantes que me has brindado.

Me gustó aquel abrazo, aquellas sinceras palabras.

Los consejos, los mimitos y las miradas cómplices que me brindaron.

Es un placer saber, que en este equipo con el que jugamos, si buscas, siempre encontrarás a alguien que te cuide y te quiera.

Y cuando lo encuentras,

hallas el preciado trofeo.

Deseado a igual que merecido.

Gracias a él, gracias a ella, a esas almas que siempre tuvieron un ala, cobijo donde podernos resguardar y recargar las baterías, para seguir jugando en el juego de la vida.

Cuídale, que sin duda, será la mejor jugada.

Gracias...

"Hagamos de la vida un juego, donde regateamos obstáculos para meter goles de sonrisas"

http://www.youtube.com/watch?v=4Jqn7fOgLLk