Ni hay control sobre la atención sanitaria a la población desplazada ni es suficiente la compensación que recibe la sanidad isleña. El presidente autonómico de los colegios de médicos canarios, Rodrigo Martín, critica que el Gobierno central paga pero "tarde y mal" y que no sólo está la población comunitaria, con cuyos países hay convenios, sino que también existe una bolsa de población suramericana e inmigrante cuyos gastos no van a ser reingresados en el sistema.

Martín cree que los ciudadanos de la UE que reciben atención sanitaria en las Islas, sobre todo aquellos que adquieren medicamentos aquí o son intervenidos, deberían tener las mismas prestaciones que reciben en sus países. "Si un español en Alemania o Inglaterra tiene que pagar determinadas prestaciones sanitarias porque allí el sistema no es universal, en España debería ser igual y no sufragar aquellos medicamentos o prestaciones que tienen que pagar en su país". En cambio, el presidente colegial sí critica que haya comunidades autónomas donde se esté restringiendo la atención sanitaria a ciudadanos españoles.

Compensación

Rodrigo Martín también alerta sobre la sobrecarga de trabajo que soportan los médicos como consecuencia de la atención que deben dispensar a los ciudadanos de otras comunidades o extranjeros. "Con esta situación ni se puede planificar el trabajo ni se compensa debidamente a los médicos por el exceso que hay sobre el cupo de pacientes que tiene cada uno", asegura. Esta situación repercute sobre las retribuciones de los médicos, que no cobran por los pacientes desplazados que atienden.

Según Martín, no sólo se sobrecarga de trabajo al facultativo, sino que se le reduce el tiempo de atención a los residentes para poder atender a los foráneos en las consultas.

Por su parte, el presidente de la Sociedad Española de Medicina de Familia en Canarias, Miguel Ángel Hernández, asegura que tanto el control sobre esta población como la facturación son "manifiestamente mejorables" y que los médicos se ven empujados en algunas ocasiones a realizar tareas burocráticos que entorpecen su trabajo.

Hernández cree que el Sistema Nacional de Salud adolece de un criterio uniforme entre el Estado y las comunidades autónomas para atender a la población desplazada y facturar en tiempo y forma los gastos que genera su atención sanitaria.