El presidente de la patronal turística de Las Palmas, Fernando Fraile, se desmarcó ayer de los hoteleros que a título personal han propuesto cambiar la subida del IGIC por una tasa a las pernoctaciones de los turistas. "No queremos ni una cosa ni otra, con el incremento del IGIC se está atentando contra el sector, lo que provocará cierre de empresas, más desempleo y menos competitividad frente a los destinos competidores", advirtió Fraile. El dirigente empresarial señaló que el sector ni siquiera está ya planteando que se aplace el aumento del IGIC para el próximo año, sino que se elimine cualquier subida fiscal y que este impuesto pase al tipo reducido como ocurre con el IVA en la Península.

Las alegaciones presentadas por la patronal turística a la subida impositiva del Ejecutivo recogen que el beneficio antes de impuestos de las empresas del sector, de media, oscila en un 10 % de las ventas, por lo que la asunción en su cuenta de resultados de un aumento del IGIC del 2 % supondría una merma en los beneficios, cuando los haya, del 20 %. Para los empresarios, este escenario significaría pura y llanamente la liquidación del sector, por lo que en Canarias, en lugar de exportar servicios turísticos "tendremos que emigrar".

Fraile cuestionó la posición del Gobierno y descartó cualquier tipo de impuesto alternativo al IGIC y que la patronal y las empresas estén a favor de una medida de este tipo.