Los acuerdos con otros partidos forman parte del ideario de Patxi López, pero solo en el caso de que puedan responder a una pregunta: "¿Para qué?" Según esa fórmula, el aspirante a tomar el mando del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) describió la ruptura del pacto de gobierno que unía a su formación con Coalición Canaria (CC) en el Gobierno de las Islas como un movimiento lógico tras discrepar sobre el destino que debía darse al dinero del Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan).

"Se rompe porque había unos recursos públicos importantes con los que se tenía que decidir cómo ayudar a la gente", resumió. Como quiera que la decisión fue "repartir con clientelismo", siempre según las afirmaciones del exlendakari, la convivencia entre ambas formaciones se tornó imposible.

Del mismo modo, cuando se le preguntó por si veía factible una gran coalición entre los dos partidos mayoritarios, el suyo y el Partido Popular (PP), en el ámbito del Estado, López volvió a preguntar "¿para qué?" El aspirante a dirigir a los socialistas se autocontestó con una nueva pregunta: "¿Para seguir con los recortes sin recuperar lo que hemos ido perdiendo?" Y concluyó en que su partido y el PP tienen "ideas diferentes sobre qué es lo que funciona".

A pesar de poner ese límite claro de inicio, el también expresidente del Congreso de los Diputados convino en que hay espacios en los que debe existir el entendimiento, como, por ejemplo, la lucha antiterrorista y la defensa de la idea de Estado. En torno a esta última y en referencia a Cataluña, Patxi López sostuvo que "nada es legítimo" en democracia si no lo avala "la legalidad".

Sin embargo, explicó que es necesario ir más allá y "tender puentes para el diálogo". Lanzó a los catalanes no independentistas el mensaje de que no les dejará "solos" y para los que sí apuestan por el soberanismo preparará "una oferta" que, según expuso, navegará en torno al modelo federal.