El 'Pimiculebrón' / La continuidad o no del estratega barcelonés en la nueva era

El latir de la caseta de la UD Las Palmas: "Pimienta se va..."

El Sevilla insiste en la contratación del barcelonés y Ramírez cuenta con la última oportunidad en esta recta final del culebrón

Pimienta abandona la sala de prensa de Barranco Seco, en una imagen de archivo.

UD Las Palmas

Paco Cabrera

Paco Cabrera

El termómetro de la caseta. En el corazón del habitáculo sagrado. Pendientes de la reunión del presidente Miguel Ángel Ramírez, así como su equipo ejecutivo, liderado por Luis Helguera, con García Pimienta, en el vestuario, la sensación es que no habrá cuarta temporada del barcelonés en la UD Las Palmas. «Parece que se va; se va...», realzan desde la sala de máquinas de un proyecto de éxito, que besó el objetivo tras un maratón de padecimiento. 

Esta tarde (17.00 horas), el plantel retoma el trabajo en la Ciudad Deportiva de Barranco Seco con vistas al cierre liguero del domingo ante el Alavés (15.15 horas, DAZN) en el Gran Canaria. Es un pulso estratégico para cortar la dinámica negativa de trece jornadas sin ganar -nueve derrotas, cuatro empates-. La última victoria pío pío se remonta al 10 de febrero ante el Valencia en el partenón de Siete Palmas.

El pulso ante la formación vitoriana de Luis García Plaza se tildó como la fiesta de la afición. Los socios del club isleño podrán acudir a la Fan Zone desde las 10.30 horas y disponen de comida y bebida gratis. Además, la guagua del equipo pasará por la calle de Fondos de Segura desde las 13.15 horas. 

Insistencia hispalense

Desde el club isleño, no se agota la vía de la diplomacia. El asunto queda en manos del poder de convencimiento de Ramírez, que ya logró renovar a Pimienta el pasado junio cuando voló de Miami a la Isla en un arrebato con final feliz. Era la última vía tras fracasar Helguera o el director general de Gestión Patricio Viñayo.

Xavi García Pimienta, durante el partido frente al Betis en el Gran Canaria.

Xavi García Pimienta, durante el partido frente al Betis en el Gran Canaria. / José Carlos Guerra

Sin embargo, en el escenario, actual, el grado de desgaste de la caseta con la figura del jefe ha subido enteros. En el reparto de minutos reside la clave. La primera línea terminó agotada, mientras existe un grupo importante de figuras con rol testimonial como Lemos (193’), Nuke Mfulu (77’), Pejiño (499’), Fabio (42’), Cristian Herrera (149’) o Curbelo (90’). 

De manera paralela al desgaste de la figura de Pimienta, cabe añadir el pedigrí que atesora en Primera. Clubes como el Mallorca o Betis movieron ficha por contratar al barcelonés, que queda liberado el 30 de junio. 

García Pimienta y el Sevilla

Pero es el Sevilla el que más insiste en fichar al supernegocio amarillo. La gestión de Pimi, 104 duelos dirigidos, jugó un papel determinante en el ascenso y la permanencia. La entidad disfrutará de su 37ª temporada en Primera en la 24-25, que será además la de la celebración del 75 aniversario. Las posturas entre la UD y Pimienta están alejadas. 

Ante este panorama, el veredicto de la afición pío pío puede convertirse en una de las imágenes del curso. El último preparador que logró la salvación de la UD fue Quique Setién (2017). La segunda vuelta de su segunda temporada fue dramática -no ganó un partido de las últimas siete jornadas-, aunque acabó con 39 puntos en la 14ª posición y sin riesgo de bajar. El culebrón de la renovación del cántabro duró cinco meses y acabó en marzo de aquel año, tras la lectura de una carta de despedida. Setién patentó un fútbol exquisito que aún se evoca en el Gran Canaria. 

Una sensación de pesimismo. Desgaste, erosión con la caseta y tres años cumpliendo con el objetivo. Tentado por el Sevilla y su billetera, el acuerdo parece lejano. El barcelonés tocó techo en la 23-24 con un plantel que dejó más dudas que certezas. Pimienta aún no se ha dirigido al vestuario, no ha trasladado su decisión. En este minuto, gana el ‘no’.