El carguero británico incendiado al suroeste de Canarias mantiene aún puntos calientes en que se alcanzan 150 grados más de dos semanas después de iniciarse el fuego a bordo, si bien hay zonas en que ha habido "un descenso notable en la temperatura", ha informado hoy la empresa de la que es propiedad.

La Bibby Line Limited destaca, en cualquier caso, que también ha disminuido el denso humo que cubría el buque MV Cheshire en jornadas anteriores, que hoy se limita a "un hilo saliendo de la bodega número 1", en tanto que las otras cuatro del barco ya no despiden ninguno, y que, por ello, se confía en que a lo largo del día puedan finalmente subir a él los técnicos contratados para su recuperación.

Estos son expertos holandeses y gibraltareños de la empresa estadounidense especializada en rescates Resolve Marine desplazados al lugar donde estaba el barco al quinto día de iniciarse el incendio, y que llevan más de semana y media esperando sin éxito la oportunidad de trabajar en el MV Cheshire, cuya situación ha hecho imposible su labor hasta ahora.

Para facilitar su trabajo se empezó a remolcar días atrás el carguero, que había quedado a la deriva el lunes 14 de agosto al ser evacuados sus 24 tripulantes y llegó a ser arrastrado hasta una distancia de 120 millas de las costas del archipiélago, acercándolo a Gran Canaria.

Situado ahora a unas 50 millas al este de dicha isla y asistido por tres remolcadores, desde la Bibby Line Limited afirman que esperan que hoy sea el día en que se pueda comenzar a actuar para atajar un incendio que se declaró el sábado 12 de agosto, si bien precisan que están hablando con las autoridades para que permitan acercar más a la costa el barco.

Puesto que reducir su distancia de tierra haría más operativa la intervención en su rescate de un helicóptero que la compañía ha contratado también para la ocasión, tanto para que los técnicos puedan abordar desde él el MV Cheshire como para trasladar materiales que pudieran hacerles falta, entre otras cosas, ha explicado la empresa.

Esta valora en su escrito el descenso del humo y de las temperaturas a bordo, si bien aclara que, no obstante, "existe un punto de calor en la bodega numero 4 donde la temperatura está a 150 grados todavía".

Además, avanza que "es probable que no se podrá salvar nada de la carga, incluso enfriándola con agua".

El MV Cheshire navegaba transportando una partida de productos químicos fertilizantes a unas 60 millas de Gran Canaria cuando el sábado 12 de agosto se declaró un incendio originado en su carga que obligó a que dos días más tarde, el lunes 14, sus 24 tripulantes fueran evacuados y llevados a tierra ante el riesgo que corrían.