"¡Cuando son las seis de la tarde empieza el mejor programa musical de la radio española!". Así presentaba en 1969 Eduardo Sotillos el programa musical Para vosotros, jóvenes, de Radio Nacional de España. Pero la cosa no quedaba así. "¡Eduardo, que aquí son las cinco!", le recordaba siempre José Antonio Pardellas, que intervenía desde Canarias. La misma historia se repetía por las mañanas, cuando, primero José Ferrer, y luego Luis del Olmo, presentaban Protagonistas, nosotros. "Me decían: ya está el canario con el rollo de siempre", recuerda Pardellas.
Siete años después, Enrique Sebastiá llegó a Canarias para dirigir RNE y solicitó que la diferencia horaria entre la Península y las Islas no solo se recordara en los programas canarios , sino que se convirtiera en una coletilla que estuviera presente en todas las intervenciones para "no desorientar a los oyentes isleños". "Se decía cada hora durante todo el día en los boletines informativos", recuerda Pardellas, que acabó convirtiéndose en el padre de "la hora menos en Canarias" que hoy se reproduce en todas las cadenas de radio constantemente.
Casi cincuenta años después, esta diferencia ha pasado a ser una auténtica seña de identidad de la región y protagoniza numerosos debates ante la posibilidad de igualar el horario canario al de la Península, ya que, sin quererlo, se trata incluso de una forma de propaganda gratuita.
Y es que, si además de asumir el mandato de la Comisión Europea para acabar con los cambios horarios de verano e invierno el Gobierno de España decide recuperar el huso que le corresponde al país, y no el de Berlín donde ahora se sitúa, los relojes se atrasarían una hora en la Península y la diferencia con las Islas y la coletilla famosa de los informativos dejaría de existir.
Según ha calculado la agencia de publicidad Oportunidades Canarias -especializada en negociar el precio de cada minuto dedicado a promociones en las parrillas de radio y televisión- el coste de la promoción gratis que proporciona a las Islas la "hora menos" ronda los 31 millones al mes, un millón al día. La cifra es 22 veces el dinero del que dispone para inversión Promotur, el ente autonómico encargado de la promoción del Archipiélago.
"Nunca pensé que calaría de esta manera", confiesa Pardellas, quien incluso ha visto en el teatro los frutos de esta idea. "Una vez en una obra escuché: "tengo 80 hijos, 79 en Canarias", añade entre risas el comunicador.
En su momento, la novedad no quedó exenta de controversias, ya que un gobernador civil preguntó al director de RNE en Canarias, Sebastiá, que si "el Archipiélago no era parte de España". Una polémica que fue rápidamente solventada y que permitió que este signo característico se mantuviera vivo hasta hoy. Para Pardellas, esta era una aclaración necesaria para incluir a los oyentes. Tal ha sido la utilidad de esta especificación que incluso "ha evitado que se pierdan aviones", según señala Pardellas.
Él recuerda especialmente una anécdota que "ha pasado desapercibida para los canarios", y es que, todos los días a las doce del mediodía, en la radio existía la costumbre de emitir El Ángelus. "El Ángel del señor anunció a María y concibió por obra del Espíritu Santo...", recita de memoria el apasionado de la radio esta oración que era difícil no conocer trabajando en este medio. En Canarias había un problema: cuando en la Península eran las doce, aquí aún eran las once. "Lo que hacíamos era grabarlo y luego reemitirlo a las doce", revela.
Si la coletilla se queda o desaparece es una decisión a la que Bruselas ha puesto fecha esta misma semana. El viernes informó que los países adheridos a la UE deberán notificar antes de abril del próximo año eligen quedarse con el horario de verano de forma permanente o si por el contrario optan por el de invierno. El gabinete Pedro Sánchez ya había anunciado la creación de una comisión de estudio, en la que ha pedido estar Canarias, para determinar su opción. Ahora tendrá que apretar el acelerador. Si se elige el verano el último toqueteo en las manecillas del reloj será el 31 de marzo de 2019; en caso contrario el domingo 27 de octubre de 2019. Luego ya no más.
La decisión no es baladí. Entran en juego factores sociales, económicos y, como en las Islas, geográficos. Y las consecuencias incidirán de forma directa en la vida cotidiana. ¿Anochece antes o amanece más tarde?
Respecto a Canarias lo que se decida debe llevar aparejado además el dilema de si se elimina para siempre una coletilla que distingue a las Islas y es ya parte de imaginario colectivo español o, puestos a cambiar husos, también se coloca al Archipiélago en el que le corresponde (una hora menos que la actual) con lo que el sonsonete que se inventó en los 70 RNE sobrevivirá.
