El juez deja libres con cargos de piratería a ocho de los migrantes amotinados en un barco

Siguen en libertad con cargos de piratería, amenazas y delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros

Imagen de archivo de un rescate de migrantes en Canarias.

Imagen de archivo de un rescate de migrantes en Canarias.

El Juzgado de Instrucción número 1 de Puerto del Rosario (Fuerteventura) ha dejado en libertad provisional a ocho de los nueve inmigrantes detenidos tras amotinarse en el remolcador que los rescató de dos pateras el pasado lunes por la noche, pero con cargos de piratería, amenazas y delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

El noveno detenido conducido ante el juez era menor de edad, por lo que ha quedado bajo la responsabilidad de la Fiscalía, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Canarias.

El juez ha tomado declaración a los ocho imputados adultos y también ha recogido las versiones de varios testigos, fundamentalmente marineros del Vos Pace, barco de Países Bajos.

La noche del lunes al martes, cuando navegaba hacia unas plataformas petrolíferas que operan en aguas del sur de Marruecos, el Vos Pace se encontró con una barca con 44 inmigrantes a bordo, a los que socorrió.

Comunicó el rescate y recibió instrucciones desde el Centro de Coordinación de Salvamento de Rabat para que se dirigiera a Agadir, ya que estaba en zona SAR (siglas internacionales de "búsqueda y rescate") bajo responsabilidad de Marruecos.

En ese momento se encontraba a unos 105 kilómetros al este de Lanzarote. Puso rumbo al puerto designado por Rabat, pero de camino se encontró una segunda patera con 35 inmigrantes, a los que también rescató, según el relato difundido por Salvamento Marítimo español.

Sin embargo, poco después el capitán del Vos Pace alertó a las autoridades españolas de que algunos de los rescatados se habían puesto "muy agresivos" al descubrir que se dirigían a Marruecos, no a Canarias, y blandieron cuchillos ante su tripulación, por lo que tomó rumbo a Fuerteventura por seguridad.

La versión de un testigo de los hechos a la que ha tenido acceso EFE -uno de los inmigrantes rescatados, al que no se reprocha ningún acto violento- ha corroborado ese relato, pero con un matiz: los chicos que se pusieron nerviosos al ver que navegaban a Agadir fundamentalmente amenazaron con autolesionarse o incluso con suicidarse si los llevaban de regreso a Marruecos.