'Musho' Granca con remontada mayúscula al Betis (87-71)

Regresó a la senda de la felicidad el Granca tras haber cedido el derbi la pasada jornada y se apunta la decimoquinta victoria de la temporada al vencer al Real Betis por 87-71 en un partido que comenzó con ciertas dudas después de ir perdiendo por el doble de puntos con el 16-32 con el que arrancó el segundo cuarto.

Reacción mayúscula para no bajar perder la estela tanto al Unicaja como al Joventut, que habían ganado sus partidos antes de que comenzara el encuentro en Siete Palmas y que brindó una auténtica fiesta a la afición insular, que se divirtió como no hacía tiempo en el Arena.

CB Gran Canaria - Coosur Real Betis (87-71)

Tanto reconocimiento a la labor de Luis Casimiro, ahora entrenador del conjunto verdiblanco, como a Eulis Báez, en su regreso al Arena después de que saliera del club hace cuatro años ya, dejó un tanto despistado al Granca en el inicio del encuentro. Necesitado del pegamento defensivo que reclama una semana tras otra Jaka Lakovic, está claro que este equipo está hecho para anotar.

Y ahí, si se mezcla la ecuación en la que las canastas no le entran al conjunto amarillo y no están a un nivel defensivo acorde a la competición, pues cualquier equipo de la liga puede hacer un roto a su rival. Por mucho que el conjunto andaluz luche por la salvación en la penúltima posición, fue capaz de endosarle 30 puntos a los amarillos en el primer cuarto.

Detectó Casimiro que la debilidad del Gran Canaria iba a estar en la posición de alero y ahí mandó los balones a un BJ Johnson tercero disfrazado de Lebron James. Todo lo que lanzaba lo metía, salvo un tiro libre, en sus ocho tiros (un triple y cinco desde la línea de 4,60) para cerrar el cuarto con 13 puntos y 2 rebotes sin que Brussino o Miquel Salvó fueran capaces de frenar al ex jugador de Orlando Magic, que acompañado por los 9 puntos y 4 rebotes de Tyson Pérez volvieron loco a los locales.

Pero si el hecho de que hoy se fuera a homenajear tanto a Casimiro como a Báez de alguna forma atrajo a un mayor número de aficionados al Arena y al principio supusiera el despiste inicial, ese mismo incremento de público le devolvió el factor calor a los claretianos. El pabellón se convirtió en una caldera después de varias acciones un tanto dubitativas de los colegiados y el espíritu del CID bañó los cimientos del recinto de Siete Palmas.

Jaleados por tres triples consecutivas que se sumaban al ya viento de favor con el que venía navegando el Granca con un parcial 13-8 esperanzador, los asientos del pabellón comenzaron a vibrar como rara vez lo había hecho en la temporada. Los decibelios dieron paso a un parcial 17-2 con el que los de Víctor García se iban al descanso confirmando la remontada momentánea y con el 46-40 en el tanteador.

En el fragor de esa exaltación sentimental desde las butacas se pudo observar a un Jaka Lakovic, al que todavía le resta un partido más de sanción que cumplirá el martes frente al Joventut, como un auténtico miembro más de la Marea Amarilla. Celebraba cada canasta y cada pérdida rival como un forofo más de alguien que siente el escudo en su pecho.

Tiras y aflojas

Una vez ajustada la diferencia de puntos, a la reanudación del partido la secuencia de canastas se fue repartiendo entre los dos contendientes. Ninguno de los dos parecía que quería volver a hacerse con las riendas del encuentro. Mucho protagonismo repartido por momentos y la coralidad por bandera tanto en el Betis, liderado por el dúo Tyson-Johnson y que se unía a la fiesta el jugador dcedido por el Granca Jean Montero, que se quedaba con 9 puntos, 4 rebotes y 7 asistencias a falta de un periodo por resolverse.

Necesitaba meter de tres el equipo de casa. Tras treinta minutos jugados solo había transformado seis canastas lejanas en 23 intentos, lo que le dejaba en un 26% en el acierto para el 65-60 con el que tenía que desgranarse el último cuarto.

Mejoró su puntería el equipo amarillo y en el último cuarto con tres triples anotados de seis intentos vislumbró la senda hacia el triunfo. Brussino con dos prácticamente seguidos se erigió en el hombre que necesitaba el Granca para despegarse y concluyó la contienda con 18 puntos, 4 rebotes y 6 asistencias.

Mantuvo su nivel de acierto ofensivo la escuadra claretiana y a poco que echó el cerrojo en su propio aro, solo concediendo once puntos en el último cuarto, el Gran Canaria se anotó el triunfo con una labor comunista en la que todos los hombres aportaron hasta la conclusión del mismo para un total de 109 unidades de valoración para el 87-71.

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