Conoce los motivos por los que Jean Montero no quiere volver al Granca

La guerra entre Jean Montero y el CB Gran Canaria ya es total. El jugador se ha declarado en rebeldía al sentirse poco valorado por la entidad claretiana en los dos años anteriores y se opone a regresar a la Isla. Después de que estuviera citado para que regresara el pasado sábado 9 de septiembre a la disciplina insular, el dominicano lleva seis días de retraso en su llamada y ya ha comunicado que "tiene voluntad de no continuar bajo la disciplina del club", según informó el propio Granca a través de un comunicado en la mañana del día 13.

A pesar de que en el club se han manifestado de manera activa que Montero está incluido dentro de los planes de la plantilla de esta temporada, el jugador en ningún momento ha manifestado su interés de volver al Gran Canaria. Más aún después de que la plantilla se reforzara con Sylven Landesberg para la posición de escolta y mantuviera a la pareja de bases Albicy y Bassas, impidiendo así que tuviera un rol acorde a lo demostrado en la última temporada.

La pasada campaña Montero fue designado el mejor jugador joven de la Liga Endesa después de que promediara 17,6 puntos, 3,3 rebotes y 4,3 asistencias de media en los 16 partidos que disputó con la camiseta del Real Betis.

Actuación destacada en el Mundial

Además, en el reciente Mundial el caribeño también cuajó una actuación destacada y llegó a los 9,8 puntos, 3,4 rebotes y 4,8 asistencias para alcanzar la segunda ronda del campeonato con República Dominicana.

Por ende, y después de haber confirmado toda la calidad que se le presuponía cuando se le fichó para la cantera del Gran Canaria a finales de 2019, el jugador entiende que sus emolumentos económicos deben ser acorde a los de un efectivo que tiene un cartel de primer nivel en Europa.

El salario que tiene Montero pactado con el Gran Canaria después de su última renegociación es el del mínimo estipulado por la ACB, fijado en 28.000 euros por temporada y por tanto percibe unos 3.000 al mes.

Sin embargo, en las cláusulas que recoge el último contrato firmado el salario en caso de que Montero disputase esta temporada con el Granca se elevaría hasta los 90.000 euros, tres veces más de lo que tiene pactado hasta ahora.

Pero no es solo cuestión monetaria el impedimento que ve Montero para regresar a la Isla. Ya el año pasado descartó la opción de comenzar la campaña porque no se sintió tampoco valorado por la dirección deportiva del club. De esta forma dejó de lado el interés económico e incluso estuvo negociando con el CB Clavijo de LEB Oro por un salario de 1.500 euros mensuales.

Finalmente fue el Betis quien asumió la cesión del dominicano desde la entidad claretiana y desembolsó una cantidad superior a los 25.000 euros, incluyendo pagos a intermediarios, por los 16 partidos que disputó Montero con la escuadra verdiblanca y que confirmaron que fue uno de los mejores jugadores de la Liga Endesa.

Trabas a su salida

Durante todo el verano tanto Jaka Lakovic como Sitapha Savané y Eulis Báez han mantenido conversaciones con Montero para intentar convencerle de que su regreso a Gran Canaria sería buena idea para dar el ansiado salto a un club de mayor relevancia que la entidad claretiana.

Sin embargo, el caribeño entiende que ese interés ya se lo ha ganado y por ello llamó el interés de clubes punteros en Europa durante este mismo verano. Un cartel que incluso se ha incrementado con su papel en el Mundial de baloncesto.

La discordancia con el Gran Canaria ha llegado a tal punto que no responde a las llamadas por parte del club al considerar que pusieron demasiadas trabas este verano para facilitar su salida.

De esta forma, las negociaciones que se pudieron mantener tanto con el Unicaja como con el Anadolu Efes no llegaron a buen puerto, incluso después de que el jugador manifestara durante su estancia en los torneos preparatorios del Mundial celebrados en Granada desde el 18 de agosto que el acuerdo con el conjunto otomano era sólido.

Así pues, Montero se encuentra en Santo Domingo con su familia a la espera de que la situación se desencalle y pueda fichar con otro club, puesto que su decisión de no regresar a Gran Canaria es totalmente firme.