AJ Slaughter, el único ganador de Copa

Se suele apelar al recurso de que los torneos cortos, esos de pocos días como los que implica la disputa de la Copa del Rey de baloncesto, puede determinarse por el estado de gracia de un jugador en concreto. No es raro escuchar entre los entendidos de la canasta eso de: «la Copa de...».

Seguramente el jugador más famoso que vaya ligado a esa expresión es la Copa de Gasol del 2001 en la que destrozó al Real Madrid con 25 puntos... precisamente en el Martín Carpena, donde se celebra este año. Este jueves, en el Martín Carpena, el Dreamland Gran Canaria juega su primer partido de Copa frente al Valencia Basket, un encuentro que se puede seguir en directo desde LA PROVINCIA, a partir de las 20.00 horas, y verlo en Movistar Deportes.

La formulación de éxito momentáneo en la Copa de un determinado jugador, sin embargo, no ha podido ligarse a ningún miembro de la plantilla del Gran Canaria, pues el único del escuadrón que dirige Jaka Lakovic que sabe lo que es ganar una Copa del Rey es AJ Slaughter, por partida doble, y no con un protagonismo extraordinario en sus respectivos equipos.

Dos títulos coperos

El primer título copero que ostenta el escolta de Kentucky ocurrió en el torneo de Grecia en la temporada 2014-2015, cuando firmó con el Panathinaikos para compartir tareas con Nikos Pappas en la posición de escolta.

A diferencia de lo que ocurre en España, en Grecia las eliminatorias se van disputando salpicadas durante la temporada, sin llegar a concentrarse en un fin de semana en una ciudad.

Así, el conjunto griego llegó a las rondas finales para dejar en el camino en los cuartos de final al Olympiacos por 77-76. Un choque entre los dos grandes del país heleno que rara vez podría darse en España, pues el Barcelona y el Real Madrid no suelen cruzarse en las eliminatorias previas.

En las semifinales el Panathinaikos venció al PAOK por 68-71, disputado en Salónica; y ya la final le reunió al Apollon Patras en el OAKA con un pabellón que se llenó –¿cuándo no lo hace?–.

El recinto de la ciudad olímpica de Atenas acogió a casi 12.000 aficionados del Panathinaikos, de los cuales unos 1.000 animaban al Apollon –por ley en Atenas está prohibido que los aficionados del Olympiacos visiten el OAKA, ni los del Panathinaikos el pabellón de la Paz y la Amistad–.

AJ Slaughter tuvo una final discreta con 3 puntos anotados, en una temporada en la que promedió 10,3 en la HEBA.

En la extensa trayectoria de Slaughter, también pasó por las filas del ASVEL Villeurbanne, club en el que también ganó el trofeo Robert Busnel después de superar una ronda, una fase concentrada para jugar los cuartos de final y la semifinal en dos días en la ciudad de Trelaze y la final en París.

Comenzó el ASVEL superando en octavos de final al Strasbourg en su cancha por 78-86; las dos siguientes rondas jugadas en el Arena Loire ganó al Monaco (81-90) y al Rouen –de segunda división–; mientras que la final venció al Le Mans, sin canastas de Slaughter.