Si en Los amigos, la primera novela de Kazumi Yumoto publicada en España, tres adolescentes urdían un plan para encontrar el sentido último de la muerte, en Viaje a la costa, su siguiente novela traducida al castellano por Rumi Sato y José Pazó Espinosa, la protagonista recibe la visita de su marido muerto después de llevar tres años desaparecido. Nadie como Yumoto, auténtica autora de culto en Japón, para convertir la lectura en una turbulenta experiencia, en un agitado viaje donde los vivos y los muertos comparten el mismo espacio. En Viaje a la costa, Yumoto prorroga y complica (para bien) el misterio de la vida y la muerte empleando los mecanismos del thriller. La novela se estructura, pues, como una indagación detectivesca pero lo que se investiga no es un crimen sino las incertidumbres de la existencia.