Síguenos en redes sociales:

Arte

La Fundación Martín Chirino y Casa África inauguran 'Afrocán', el retorno del escultor a la esencia de la máscara

La Fundación Martín Chirino y Casa África estrenan la exposición y publican el segundo tomo de la Enciclopedia Martín Chirino | La muestra estará vigente hasta septiembre

Exposición 'Afrocan' de Martín ChirinoAndrés Cruz

10

"Nunca podrá ser destruida la huella de nuestros orígenes. Ni la conquista, ni la colonización, ni el centralismo, han logrado borrar la certidumbre de esta cultura viva. No negamos los lazos que nos unen a los pueblos de España, pero reivindicamos nuestra propia personalidad", reza el segundo punto del Manifiesto de El Hierro, datado el 5 de septiembre de 1976. Esa frase, tan contundente como esclarecedora, fue refrendada por los artistas, intelectuales y activistas de la sociedad canaria del momento y está ligada al origen de la nueva exposición que presenta la Fundación Martín Chirino y Casa África: Afrocán. El oráculo del Viento. Una muestra, acompañada por la publicación del segundo volumen de la Enciclopedia Martín Chirino, que persigue visibilizar y difundir este período del escultor que refleja su evolución artística al unir la esencia del Archipiélago con su aspiración tricontinental.

El recorrido, repartido entre las sedes de ambas instituciones y disponible desde hoy hasta el 18 de septiembre, cuenta con esculturas, dibujos, fotografías y material documental que combinan piezas tribales de Mali, República Democrática del Congo o Gabón, con autores de la talla de Alexander Rodchencko y su maestro, Julio González y Ferrant. La colaboración entre las entidades responde a "mostrar, enseñar y explicar a través del arte con el fin de romper estereotipos que favorezcan la creatividad y la búsqueda de nuevos horizontes culturales", recalcó el director general de Casa África, José Segura Clavell, durante la presentación en rueda de prensa esta mañana.

"La exposición muestra el compromiso de Chirino consigo mismo, con el paisaje y la época a nivel social. Afrocán es un neologismo que alude a la doble raíz canaria y africana, ya que, si desde París se había acuñado el término afroeuropeo, esta palabra era una voz natural con dos términos que aludían a una AfriCanarias", añadió. Además, Jesús María Castaño, director de la Fundación Martín Chirino, recordó el trabajo que se está realizando para conformar la Enciclopedia Martín Chirino, la cual contará con doce entregas y de la que ya ha sido publicado en primer término Reinas Negras, en colaboración de la Fundación Azcona.

Entre el origen y la proyección

El autor de la segunda monografía, Antonio Manuel González, hizo un recorrido por los significados que encierra un legado en constante descubrimiento. Aquella amistad iniciada a finales de la década de los 80, le ha permitido conocer de cerca las inquietudes que mantenían despierto a Chirino ante el mundo. Las tres líneas que recorren el despliegue escultórico se centran, en el inicio, en un acercamiento al primivitismo de las vanguardias que pretendía tomar distancia del eurocentrismo y del que bebieron Gauguin , Matisse o Picasso. El uso de las máscaras y esculturas africanas se colaron en el imaginario vanguardista debido al tono mágico y expresivo de lo natural, hechos que afectaron a la concepción artística de Chirino.

Te puede interesar:

Entonces, la segunda línea afronta la relación entre la canariedad y la africanidad. Un hecho que, como en sus coetáneos, despertó gracias a la investigación que realizó el grancanario en los distintos vestigios aborígenes de las Islas. Así, tomó la espiral como firma y seña de su trayectoria y metáfora de la existencia: "La espiral marca las constantes de lo particular hacia lo eterno", expresó González. "La reivindicación de la canariedad y la raíz africana acercan ambos contextos, aunque no hay que olvidar que Afrocán es también un acercamiento a la cultura afroamericana". El diálogo cruzado entre tantas manifestaciones no hizo más que enriquecer y ampliar la mirada del intelectual, tanto que su amigo e investigador relaciona al artista con el mito de Dédalo al intuir en la hazaña del constructor de laberintos aspectos del humano que lograba en los metales la ligereza del viento.

Así, el hierro con el que forjó Chirino su legado, volátil e imperecedero, se convierte finalmente en la máscara de una serie que trabajó a lo largo de su vida donde lo universal y el presente colisionaban, detalla el autor. El cuarto guion del Manifiesto de El Hierro indica: "Contra el tópico del intimismo, nuestra vocación universal. Contra la pretensión de cospolitismo, nuestra raíz popular. Contra la acusación de aislamiento, nuestra solidaridad continental". La línea oval marca la última tendencia del artista en Afrocán (2012) y vuelve a los inicios, aunque nunca recala en el mismo lugar. Como Ulises a su regreso a Ítaca, Chirino regresó a su tierra fortalecido por la experiencia de un mundo que confluyó en su creación.

Pulsa para ver más contenido para ti