'La exposición 023' reflexiona a través de la emoción

Para un mundo mejor, los ingredientes son la colaboración, la tolerancia y la empatía. Así lo han demostrado los alumnos y alumnas becados por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria para participar en un proyecto que forma parte del taller PSJM LPGC Workshop. En su décima edición, los ocho participantes han desarrollado 'La Exposición 023', un conjunto de tres piezas artísticas que dan visibilidad a distintas circunstancias sociales. Hasta el próximo domingo 5 de noviembre, el Centro Cultural Pepe Dámaso de La Isleta invita a todo el mundo a tomar conciencia sobre la soledad de los mayores en nuestra sociedad, la tolerancia de la diversidad y la vida en comunidad.

Como fruto de la convocatoria impartida por el colectivo PSJM, ocho alumnos con formación y experiencia en áreas de la creación teatral, historia, gestión cultural, artes plásticas, activismo vecinal y artesanía ecológica; han contado con un intenso mes para desarollar 'La Exposición 023'. "Nos gusta juntar y hacer equipos multidisciplinarios", explica Pablo San José quien, junto a Cynthia Viera, dirige el PSJM.

Durante el mes de septiembre, los participantes han podido adquirir los conocimientos que requiere cada fase de un proceso creativo. «En un mes los alumnos realizan desde la inauguración de un proyecto hasta las acciones de atención a la prensa», cuenta Pablo San José. «Aprenden también a hacer una factura. Es algo que normalmente no se enseña en las facultades de Bellas Artes», agrega.

Dejar el ego a un lado

El taller trata cuestiones como la teoría institucional del arte, la práctica de la crítica institucional, los procedimientos profesionales de los artistas, el análisis crítico y la creación colectiva. «Es un taller de arte colectivo, no competitivo», aclara Pablo San José. La importancia de este proyecto reside en dejar a un lado el ego y trabajar los valores ético-productivos del trabajo en equipo y en diferentes colectivos.

Tras un duro mes de septiembre, el 6 de octubre el Centro Cultural Pepe Dámaso presentó 'La Exposición 023'. La planta superior del centro acoge la instalación 'Tejido Social'. La artesana textil, Ulrike Güse; y el activista, Jonathan Ortega; reciben al público con una intervención colaborativa en las puertas del edificio y materializan su creación en un vídeo proyectado en la sala de exposiciones. «En el vídeo se ve la parte distópica o realista del barrio», explica San José. La creación audiovisual reproduce, por un lado, una caminata realizada en la parte baja de La Isleta, una zona afectada por el avance urbanístico. Otra parte plasma la realización de una obra textil colectiva en la reja de entrada al Centro. El colorido bordado creado por los dos alumnos ha dado lugar a una red común o tejido social.

Los matices entre el blanco y el negro

'Soledad', la instalación llevada a cabo por Alicia Lasala, Yaiza Santana y Alexis Corujo, sobrecoge con los testimonios de personas mayores que viven solas. "El espectador o espectadora deja de ser espectador para convertirse en usuario", explica el propulsor de PSJM. La obra recrea la habitación de una señora mayor en la que el público puede sentarse y escuchar las historias recogidas a través del Teléfono de la Esperanza. "Es una pieza muy emocionante, triste, pero muy importante porque es un sector de la sociedad muchas veces olvidado», añade Pablo San José.

Una pieza mural en la planta superior del Centro destaca por un degradado por barras que va del negro al blanco. Bajo el título 'Tolerancia', Vivian Mantilla ha querido recordar que "entre el blanco y el negro hay muchos matices". Esta instalación recalca la importancia de celebrar la diversidad humana y respetar los derechos fundamentales de todas las personas. En un llamamiento a la tolerancia, Pablo San José recuerda que "del negro al blanco hay toda una gama de grises y, por desgracia, se olvida a menudo".

Cynthia Viera y Pablo San José conforman el taller PSJM, un equipo de creación, teoría y gestión artística que se desarolla por primera vez en el Instituto Cervantes de Berlín. En Las Palmas de Gran Canaria, el equipo continuó desarollando labores artísticas desde el Gabinete Literario hasta la llegada de la pandemia, que exigió la creación de un formato online para impedir la parálisis del taller. El Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM) fue la solución hasta la vuelta del formato presencial con el apoyo del Ayuntamiento y el Centro Cultural Pepe Dámaso. Como parte de su décima edición, el taller ha vuelto con La Exposición 023, un proyecto que, como expresa Pablo San José, pretende "hacer reflexionar a través de la emoción".