El proyecto del Herbalife Gran Canaria para la temporada 2014-15 se levantó, el pasado verano, entre disparidad de criterios. Berdi Pérez, director deportivo del club, propuso la renovación de Pedro Martínez y el consejo de administración, controlado por Joaquín Costa y Lucas Bravo de Laguna, rechazó esa sugerencia. Esa diferencia de posturas se mantuvo en el siguiente paso, la contratación del nuevo entrenador: la directiva se lanzó a por Aíto García Reneses; el ejecutivo realizó hasta tres ofertas a Sito Alonso que, en las tres ocasiones, rechazó al Granca.
Nueve meses después de aquel enredo, el Herbalife y Sito Alonso se cruzarán este domingo (11.15 horas, Televisión Canaria) en el camino. A la cita, el equipo claretiano llega con García Reneses al mando -tras imponerse la postura de Costa y Bravo de Laguna y después de firmar un contrato por dos temporadas- y con la mochila cargada de dudas: con un balance de 12 victorias y 11 derrotas ahora mismo no ocupa plaza para jugar el Playoff por el título de la Liga Endesa.
Enfrente se topará con un rival que, después de superar mil y un problemas económicos que estuvieron a punto de provocar su desaparición, se ha convertido en una de las revelaciones de la campaña: participó en la Copa del Rey y es cuarto en la clasificación con 16 triunfos en 23 jornadas.
A la hora de explicar el buen rendimiento de un Bilbao Basket que comenzó a competir con lo justo, la mayoría de las miradas apuntan hacia Sito Alonso. Técnico asistente de García Reneses en el FIATC Joventut entre 2005 y 2008, la carrera del técnico madrileño se disparó a partir de 2011, cuando asumió el cargo de primer entrenador del Gipuzkoa Basket.
De un perfil similar al de Pedro Martínez o Salva Maldonado, Sito Alonso fue la segunda apuesta de Berdi Pérez que no cuajó: negó tres veces al Granca porque ya había dado su palabra al Bilbao Basket.